Un pequeño respiro positivo. Así se han tomado los trabajadores de Danone en Salas la reunión de este jueves con los directivos de la multinacional francesa al aceptar estos la opción de vender la fábrica «a un comprador solvente». El punto de partida, lo habían advertido todas las administraciones, era el mantenimiento de la actividad, y la empresa, mostrando esa «voluntad de diálogo», está abierta a que «la actividad pueda continuar, con independencia del sector».
El secretario y portavoz del comité de empresa, Juan Carlos García, explicó tras el nuevo encuentro negociador, que Danone les ha trasladado su propuesta de recolocaciones, prejubilaciones e indemnizaciones para la plantilla, que ahora se tendrá que analizar. Aunque, lo que tienen claro los representantes de los trabajadores, es que «queremos que el nuevo dueño de la planta de Salas dé prioridad en la contratación a la gente que ahora quede en la calle». Y han pedido que así quede reflejado.
Las negociaciones entre empresa y comité continuará la próxima semana. Mientras, la plantilla insistirá a las administraciones regional y local que, una vez conseguido el compromiso de Danone de favorecer la venta de la fábrica, evitando así el cierre de la misma, se pongan en marcha los mecanismos necesarios para encontrar ese comprador. «No se puede perder tiempo».