A partir de mañana los consumidores pagarán 15 centavos adicionales por el cuartillo de leche fresca, luego de que la Oficina para la Reglamentación de la Industria Lechera (ORIL) emitió hace dos semanas una orden administrativa que desregula el precio máximo de venta de las elaboradoras.

La orden establece el precio mínimo en la venta de los diferentes envases de la leche fresca a nivel de elaborador, y un margen de ganancia fijo a nivel del detallista, lo que resulta en el nuevo precio para los consumidores.

Desde mañana, el cuartillo de leche costará $1.99, el medio galón $3.97 y el galón $6.97.

El secretario del Departamento de Agricultura, Ramón González, informó que es un experimento en lo que concluye el estudio que están realizando y que, a su juicio, demostrará si existe la necesidad de aumentar el margen de ganancia de las empresas elaboradoras.

Sin embargo, el funcionario sostuvo que fue sorpresivo un alza tan significativa, ya que estimaba que sería entre uno a dos centavos el alza por litro.

“Las elaboradoras estaban exigiendo unos aumentos gigantescos. En lo que el estudio exhaustivo se concluye, optamos por brindarles esta oportunidad —a modo de prueba— de que pudieran fijar libremente su precio de venta, basados en costos variables como el de energía, combustible y otros, pero la cantidad fijada es un abuso al consumidor. Si vemos que la práctica persiste y es irrazonable, dejamos sin efecto la orden, volviendo a establecer un tope máximo”, advirtió González, quien adelantó que la determinación final se podría tomar en unas dos semanas.

El secretario apuntó a que el precio mínimo por reglamento es de $1.84, y que no se puede imponer de manera arbitraria al comerciante un precio por encima, porque todo aumento se tiene que negociar.

“Los comerciantes tendrán que ponerse los guantes con las plantas elaboradoras para lograr un precio razonable y no abusivo como el que pretenden imponer”, señaló.

Las plantas elaboradoras, Suiza —que tiene el 70% del mercado de la leche fresca— y Tres Monjitas —con 30% del mercado— confirmaron a EL VOCERO que el aumento es igual en ambas empresas y que entrará en vigor este próximo jueves.

El titular de Agricultura expresó que la determinación de las dos elaboradoras de leche fresca le preocupa.

“Me sorprende que ambas empresas vayan a imponer el mismo aumento sin haberse puesto de acuerdo, lo que representa un ‘price fixing’ —acuerdos entre competidores para aumentar o reducir los niveles de precios— y esa práctica es ilegal. Cada planta debe demostrar cómo llegó a ese número”, puntualizó.

Sobre la coincidencia en precio, el administrador de la ORIL, Javier A. Lugo Rullán, sostuvo que tras examinar los gastos, el hecho de que ambas plantas hayan fijado un aumento de la misma cuantía, podría ser casualidad y no por mutuo acuerdo.

Entiende que los 15 centavos de aumento en el cuartillo de leche está dentro de la ganancia razonable, tomando en cuenta el aumento en el costo de operación.

“Eso comienza este jueves, pero al competir los precios comenzarán a ajustarse. Siempre miramos la elasticidad del mercado. No fijamos precios únicos. Entendemos que las plantas harán sus ajustes y los precios deberán comenzar a bajar la próxima semana”, indicó Lugo Rullán.

Agregó que la orden, que es novel, no está escrita en piedra, por lo que fiscalizarán el comportamiento del mercado.

Reaccionan las elaboradoras

Vaquería Tres Monjitas comunicó que el nuevo precio para los consumidores de la leche fresca se establecerá en escala, y que ofrecerán al consumidor más valor y menor precio por onza en empaques más grandes.

Orlando González Núñez, gerente general de Tres Monjitas, sostuvo que “de esta forma, el consumidor podrá adquirir un producto de un tamaño mayor, pagando menos por onza, con la confianza de que se mantendrá fresco por más tiempo”.

Según González, los estudios económicos realizados por las plantas elaboradoras de leche fresca señalan la necesidad de un aumento de sobre 20 centavos por cuartillo, y en conversaciones preliminares con la ORIL se había sugerido un incremento temporero de 16 centavos por cuartillo, mientras la agencia reguladora completa sus propios estudios de mercado.

El aumento promedio entre todos los tamaños de la leche Tres Monjitas será de 8 centavos por cuartillo.

En torno a la fijación del precio, informó que fue basado en los análisis internos de gastos, y que fueron los primeros en anunciar a los clientes sobre el aumento.

Egberto Torres, CEO de Suiza Dairy, expuso que mañana los comerciantes se enterarán del ajuste en precio, ya que aún están “revisando un par de cosas”. “Esto será oficial el 1ro de septiembre. No estamos autorizados a comentar hasta ese entonces”, afirmó.

No obstante, EL VOCERO supo que el aumento será también de 15 centavos por cuartillo de leche, y que aplicará a todos los comerciantes.

Reaccionan los comerciantes

Néstor Rivera, presidente de la Asociación de la Industria del Pan, sostuvo que el alza en el precio de la leche -el segundo en lo que va de año- impacta a los clientes, porque se suma al del café, a los aumentos previos a la leche fresca, al alza en la harina, el aceite, las bolsas de empaque, y afirmó que los comerciantes ya no pueden asumir más aumentos.

“Este aumento beneficia a los productores, no al comerciante. Para nosotros no han fijado un solo aumento y somos los que mercadeamos y le vendemos el producto al consumidor. Está verdaderamente difícil poder llevar un negocio pequeño hoy día. Muchos negocios pudiesen hasta cerrar con tantos aumentos”, enfatizó Rivera.

Por su parte, el comerciante Antonio Meléndez, expresó que el aumento impacta los márgenes de ganancia por la venta de la leche fresca.

“Son varios aumentos consecutivos en los últimos meses, lo que desestabiliza las operaciones, ya que no podemos transferir la totalidad de esos aumentos a nuestros clientes. Siempre hay que asumir alguna parte y las ganancias se siguen reduciendo”, apuntó.