Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha denunciado la situación del sector productor a la que está llevando la distribución, “con posibles prácticas comerciales desleales e irresponsables, y la industria, con sus conductas abusivas”, señala en un comunicado.
Según la organización la formación de precios marcada por la distribución y la “imposición de condiciones” por parte de la industria y ausencia de una negociación real de los contratos, son en buena medida responsables de que el ganadero no pueda repercutir sus costes de producción en el precio de la leche que entrega.
Critica así la “poca eficacia” de las medidas puestas en marcha desde la Administración: “Que el sector de vacuno de leche se hunde desde hace años no es ninguna novedad, de media, se cierran 70 ganaderías cada mes en España (5.000 en 6 años según FEGA), sin que ninguna medida tomada desde la Administración haya frenado esta debacle del sector”, afirma.
Los ganaderos denuncian que cinco grandes empresas de distribución y cinco grandes industrias “imponen las tendencias y precios a los productores y provocan la ruina del sector”.
Unión de Uniones subraya que el ganadero es “el único eslabón de la cadena que pierde dinero por realizar su actividad”
Asimismo, explica que es la “guerra de precios” en la que se embarcan las cinco grandes cadenas, que acaparan la mayor parte de la cuota de mercado de alimentación, lo que provoca “un gran impacto” en el resto de la cadena, que, junto con la “desproporción del tamaño en la negociación”, salpica al ganadero, “siendo el único eslabón que pierde dinero por realizar su actividad”, subraya.
LOS GANADEROS SEÑALAN A MERCADONA
Específicamente, la organización señala a Mercadona, como “líder de la distribución”, y afirma que tendría presuntamente gran parte de la responsabilidad en esta “debacle del sector lácteo”.
“El precio de venta de marcas blancas, que supone la mitad de las ventas de este producto, oscila en torno a los 0,60 €/l, precio que haría que los interproveedores, para ser viables, paguen unos importes extraordinariamente bajos al sector primario y que no sirven ni para cubrir costes”, señala Unión de Uniones.
“Así, la falta de un balance positivo repercute directamente en la viabilidad de la granja y en la capacidad de los profesionales para crecer o para mejorar sus instalaciones o innovar o adaptar las granjas a las mayores exigencias ambientales o de bienestar animal”, añade.
Por todo ello, la entidad propone que, para mejorar la situación del sector lácteo, la Administración prohíba y persiga la reventa a pérdidas en la cadena alimentaria, y defina una cuota de mercado específica en la alimentación.