El Sindicato Labrego Galego (SLG) afirma que “el silencio y carencia total de iniciativas por parte de la Consellería de Medio Rural en el sector lácteo hace que las industrias estén aprovechando el vacío para extorsionar de nuevo a las granjas, obligándolas a firmar contratos que congelan los precios en una situación de alza generalizada”.
Según el SLG, los diversos indicadores subrayan que Galicia sigue siendo la comunidad del Estado con el precio medio más bajo (32,6 céntimos en noviembre de 2019), la única que no supera los 33 céntimos y muy lejos de la media española (34 céntimos) o europea (35,31 céntimos).
El sindicato añade que “la tendencia al alza en la Unión Europea hizo que, desde junio a diciembre, el precio medio comunitario se incrementase un 6,4%. Esta tendencia también se dio en el Estado y en Galicia, pero, al partir en nuestra tierra de unos valores miserables, el aumento en el precio en los últimos meses sigue situándonos en el último puesto del Estado y en la cola de la Unión Europea en cuestión de precios”.
El SLG considera esta situación una “anomalía que se hace más insultante si comparamos el precio medio en Galicia con el de las comunidades vecinas: 34,2 céntimos en Castilla y León y 35,7 céntimos en Asturias, dándose el caso de una misma empresa que recoge leche en granjas vecinas de distintas comunidades manteniendo esa brecha discriminatoria en el valor del producto recogido”.
En la última sesión del Consejo Agrario Gallego, el SLG reclamó la necesidad de convocar de manera urgente la Mesa de la Leche “para que Medio Rural arbitre un diálogo y unas negociaciones necesarias entre los diversos agentes del sector para terminar con estas anomalías de mercado que discriminan flagrantemente nuestras granjas”.
El SLG recuerda que el conselleiro de Medio Rural, José González, todavía no ha respondido a esa petición y ahora “miles de granjas no tienen poder de negociación ante las industrias para la nueva campaña 2020-2021”.