Durante el 2020, el aumento en el precio de la leche cruda, la que se ordeña en los tambos, perdió por goleada contra la inflación y los costos. El último informe lácteo de Aacrea advierte que el valor que reciben los tamberos se incrementó un 27% contra una inflación del 36%.
“En los últimos 12 meses, el precio real pagado al productor disminuyó un 6,9%. Solamente en tres meses de todo el 2020, el tambero pudo recuperar precio en pesos contra la inflación”, advierte el estudio.
Al analizar el índice de costos (IC) y el índice de precios (IP), el informe recuerda que los incrementos en el dólar, el maíz y el pellet de soja fueron mucho más significativo que el valor que recibieron los tamberos por cada litro de leche en la tranquera del tambo.
“La variación interanual en el IC fue de un 71%, mientras que la del índice de precio fue de 27%. El precio de la leche ha quedado muy por detrás del ajuste experimentado por los insumos dolarizado, semillas, fertilizantes, fitosanitarios, balanceados y maíz”, insiste Aacrea.
La relación insumo-producto también quedó muy desbalanceada por el aumento en las cotizaciones de los granos. “En diciembre, un tambero pudo comprar 1,3 kilos de maíz con un litro de leche. Esta relación es un 32% menos que el promedio de los últimos cinco años y la más baja desde comienzo de 2011”, precisa el estudio.
Producción y exportaciones
Con más de 11.100 millones de litros ordeñados, la producción lechera del 2020 aumentó un 7% en comparación con el 2019. “Según los datos informados por los grupos Crea, esta mejora estaría dada principalmente por un aumento en la producción individual de las vacas en ordeñe”, destaca Aacrea.
En relación con las ventas globales argentinas de lácteos (sobre todo leche en polvo y quesos), en el 2020 se exportó un 23% más que en el 2019, según datos provisorios del Indec. “El año pasado se comercializaron productos lácteos por un total de 1,127 millones de dólares”, concluye el informe.