Con una vasta experiencia en la investigación relacionada con los productos de leche en la Región Laguna, Miguel Mellado Bosque es un investigador, orgullo de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), que pertenece al nivel III del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y el primero del norte de México, que recientemente alcanzó su categoría de emérito.

Egresado de la UAAAN, fue becado por su alma máter en universidades de Estados Unidos, pero regresó a la casa de estudios donde, hoy por hoy, continúa realizando investigaciones para los productores de leche de la Región Laguna de Coahuila, una zona cuyas altas temperaturas afectan la fertilidad de las vacas, tema al que recientemente enfocó sus investigaciones.

Con la gran sencillez que lo caracteriza, el investigador habla muy poco sobre sus logros y reconocimientos, pero, gracias a sus alcances, ha formado parte del Comité Dictaminador del Sistema Nacional de Investigadores para aceptar nuevos miembros; cuenta además con el reconocimiento del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Mellado Bosque fue alumno fundador del equipo de Plantas y Pastizales, conformado por cuatro estudiantes en 1975, un equipo de jóvenes universitarios que año con año se ha consolidado en la participación del concurso internacional donde compiten entre 28 y 32 universidades de México, Estados Unidos y Canadá.

“Últimamente me he enfocado a la investigación en productos de leche en las vacas de La Laguna, y tengo investigaciones en muchas ramas: en genética, reproducción y nutrición; últimamente a la de sanidad, enfocado al impacto del estrés por calor sobre las vacas lecheras, La Laguna es una zona terriblemente caliente y muy adversa para la vaca lechera, y la zona determina su productividad, pues son los 26 grados centígrados”, señala.

Asegura que si la temperatura se rebasa, la vaca se estresa por calor y entonces sufre toda clase de problemas, que van desde los sanitarios, reproductivos; en la producción de leche, problemas con la composición, un crecimiento reducido de los becerros y problemas como una serie de enfermedades.

Por ello, en la actualidad, su investigación está enfocada en conocer la importancia en el estrés de las vacas, su productividad y su reproducción, la calidad de la leche.

Mellado Bosque recalcó que en su investigación sobre la fertilidad de las vacas en esas condiciones y el resultado es muy claro respecto a que en esas condiciones es muy baja en las vacas de la Región Laguna

“En épocas de calor, como junio, julio y agosto, los niveles de fertilidad se van a solo el 30%, lo que quiere decir que los ganaderos de La Laguna tienen un problema muy fuerte en la parte reproductiva; todo esto redunda en la producción de leche y las alternativas que tienen son las que hemos investigado y una que se ha extendido en los productores es que la lactancia puede ser inducida hormonalmente sin necesidad de que la vaca tenga un parto”, dijo.

SE EXTIENDE LA VIDA ANIMAL

Mellado Bosque recalcó que a partir de las recetas de hormonas en las vacas de La Laguna, estas pueden empezar a producir sin que hayan parido un becerro, elevando los 10 meses de producción de leche que recomienda Estados Unidos y Canadá hasta los 300, 500, 600, 800 e incluso hasta los mil días, produciendo entre 20 y 25 litros al día.

“La leche que producen las vacas con las hormonas es muy cercano a lo que producirían las vacas con un parto normal, entonces si la vaca no se reproduce y no queda preñada, esa vaca puede inducirse a la lactancia, tener una lactancia sin tener un parto y entonces los productores se ven beneficiados porque sus vacas no tienen que eliminarlas porque en otros años, antes de que tuviéramos esta tecnología, estas vacas irremediablemente tenían que ir al rastro porque ya no se reproducen”, recalca.

Esto, además de evitar una serie de enfermedades que se producen inmediatamente después del parto en las vacas, permite extender la vida del animal, pues generalmente cuando estas producen leche tras un parto, dejan su vida productiva en tres o cuatro años y al ampliar los plazos para sus partos de cada 12 meses, se van a 15 o 20 meses, alargando los años de producción hasta los 7 años.

“Tenemos vacas que producen incluso hasta los mil días, esto es muy novedoso, de hecho estas prácticas no las utilizan en el resto del mundo pero aquí en La Laguna, como tienen muy alto potencial de producción de leche, son vacas que a los 600, 700 días, siguen produciendo más de 20 litros por día y son vacas que a los 600, 700 u 800 días siguen produciendo y mientras sigan produciendo esa cantidad, siguen siendo rentables”, expuso.

El dato:

Ha dirigido 75 tesis de licenciatura, 46 de maestría y 19 de doctorado.
Es miembro del Sistema Nacional de Investigadores.

Para saber:

El egresado de la Narro ha publicado dos libros de texto de la editorial Trillas y 300 artículos en revistas con arbitraje