La Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) realiza desde este martes un paro de ocho horas por trabajador, que se extenderá hasta el sábado 25 de junio.
“Se está poniendo en riesgo la credibilidad y futuro del país con serias e irresponsables amenazas a un sector que orgullosamente ofrece extraordinarios beneficios laborales”, indicaron los empresarios.
Según informaron, el 20 de julio el Poder Ejecutivo formuló una nueva propuesta de cláusula de paz que fue rechazada por el gremio. En el comunicado las empresas detallan que en la misma se mantiene una propuesta económica que “es significativamente mejor que los lineamientos del Poder Ejecutivo” (recuperación de 1.6% en 18 meses) y de la mayoría de los convenios firmados en otras ramas de actividad y que están dispuestos a aceptar, ya que habría una recuperación salarial de 4,82% en 24 meses, se asegura la inflación anual futura y durante 2025 se otorgan $ 2.000 por trabajador mensualmente.
La cláusula presentada por el Ministerio de Trabajo dispone que el compromiso de paz no alcanza las siguientes situaciones: reivindicaciones salariales originadas por actualizaciones tecnológicas futuras y ya concretadas, en cuanto no haya sido puesta en funcionamiento; reestructuras operativas o funcionales; afectaciones de condiciones de trabajo no vinculadas a aspectos salariales; afectación de fuentes laborales o cualquier acto o decisión de similar tenor no vinculado directamente con aspectos salariales. Además expresa que “en ningún caso se restringirá de ninguna forma las instancias bipartitas o tripartitas en la que pueda plantearse o negociar sobre cualquier asunto que las partes entiendan pertinente”.
