Esta dualidad del mercado lechero argentino, inicio el encendido de una serie de alarmas en la producción primaria de leche y la producción industrial.
Las declaraciones del Presidente de APYMEL, Pablo Villano, fueron la punta de lanza de esas alarmas encendidas. En resumen se refirió a la menor demanda de lácteos por la crisis y a un mercado interno que no despega (¿LO HARA?)
El bendito precio al productor
Hace tiempo que no observábamos una buena relación insumo producto. Nos animamos a realizar un poco de futurología: CREEMOS QUE ESTA RELACIÓN SE VA A MANTENER.
Hemos observado que Junio podría ser el mes de mayor precio pagado por la industria lechera al productor tambero durante este 2019.
¿Y Julio? Observamos una desaceleración en la demanda de los productos lácteos. Las empresas elaboradoras, que hace 20 días no podían abastecer a sus clientes como estos lo solicitaban, desde hace una semana los teléfonos de sus clientes comenzaron a sonar con más ofertas de productos.
Un producto que todavía no está, pero que las fábricas pretenden “vender” anticipadamente para poder tener una planificación de sus costos inmediatos.
Por estos motivos, creemos que no vamos a tener un Julio Bárbaro.
