El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche, Walter Frisch, dijo que hoy “más que nunca”, es momento “de trabajar más sobre los costos a nivel del Instituto Nacional de la Leche (Inale)”, porque entendió que hasta ahora “no se hizo nada”.
Ayudada por los precios internacionales, especialmente por el repunte de valores para la leche en polvo entera, la lechería uruguaya está un poco mejor, pero los costos siguen pesando sobre las empresas y el otoño es el momento donde mayor desembolso de dinero hay que hacer sobre los tambos para preparar el invierno.
“Por incidencia de los precios en el mercado internacional llegamos a abatir un poco los costos, porque nos están dando un leve margen”, admite Frisch. En caso de Uruguay, el costo del litro de leche está por encima de US$ 0,30 y el precio de la leche se ubica algo por encima de ese promedio.
El precio promedio de marzo estuvo en US$ 0,32 por litro, o $ 14, según los datos del Instituto Nacional de la Leche. “Entendemos que tenemos que seguir trabajando y estar más preocupados que nunca por los costos”, consideró el gremialista lechero.
Más allá del repunte de valores, que al menos se ve en los remates de la neocelandesa láctea Fonterra, con contratos a futuro de leche en polvo con valores estabilizados por encima de US$ 3.000 la tonelada, en el mercado local, “lamentablemente no hay puja por la leche” a nivel de las empresas industrializadoras del sector.
Esa falta de competencia a nivel de las empresas lácteas por captar mayor volumen de leche, es lo que hace que el precio al productor no suba más.
Presiones. Frisch entiende que no hay que presionar sólo a Conaprole para mejorar el precio de leche, también hay que ejercer presión sobre las demás lácteas que son exportadoras y que están recibiendo mejores valores internacionales. Incluso dijo que no todas están al día con los pagos.
“Para Conaprole, como empresa, sacar el precio es bastante complicado porque depende de un mercado internacional y de un mercado interno. Hay otras empresas lácteas que se dedican sólo a exportar y deberían ser las primeras en subir el precio de leche al productor con esta burbuja de valores internacionales”, criticó el titular de la ANPL.
Según los productores, el problema es que “esas empresas no acusan ni dicen nada sobre esta burbuja de precios. Se entiende que no son cooperativas, pero están haciendo enormes ganancias”, enfatizó Frisch.
A su vez, recordó que hay una enorme preocupación por los costos industriales y a nivel político, también crece esa preocupación porque esas empresas no tienen volumen de leche, pero en el mercado “no se ve una puja por captar más volumen”, criticó Frisch.
Números. En otro orden, según los números del Instituto Nacional de la Leche de abril – en el ejercicio 2020/2021- la remisión quedó en 147 millones de litros y está 9% por encima de igual mes del año pasado. El precio de leche al productor por litro, medido en pesos ($ 14) se ubicó 14% por encima comparando abril de 2020 con igual mes de 2021 y 12% medido en dólares (US$ 0,32 por litro).
A su vez, el poder de compra del productor subió 2% y el precio de la leche en polvo industria cayó 1% en las mismas fechas de la comparación anterior y quedó en US$ 0,47 por litro. La facturación por exportaciones mejoró 19% y se posicionó en US$ 56 millones, mientras que el mercado interno generó US$ 30 millones y tuvo una caída en la demanda de 13%, según Inale.
Mientras tanto, el índice de precios de los productos lácteos de la FAO para abril 2021 aumentó 1,2% comparado con marzo 2021, registrando el onceavo mes consecutivo de aumentos y empuja el índice a un valor 24,1% por encima del registrado en el mismo mes del año pasado.
El mes pasado, subieron los precios internacionales de manteca, sustentadas por la sólida demanda de importaciones de Asia, pese al debilitamiento de la demanda interna en Europa. Los precios de la leche en polvo descremada se incrementaron debido a la gran demanda de importaciones en Asia oriental, entre otros destinos.