“En la actualidad, tan solo seis plantas aportan el 75% de la ingesta calórica de los humanos, y lo mismo pasa con los animales: el virus ha evidenciado que seremos más fuertes si clusterizamos la industria”. Para afrontar el cambio, Faber propone impulsar un sistema productivo que apueste más por la proximidad y que ponga en valor las dietas y los productos alimentarios locales. “Necesitamos reconectar con la naturaleza y ser más sostenibles produciendo lo que el clima y el suelo de cada lugar nos pida”.
Faber ha destacado durante su intervención los cambios sociales y económicos que causará el Covid-19 y el impacto que esto tendrá en el sector alimentario. Así, ha considerado que la pandemia ha ocasionado “una profunda crisis de nuestro modo de vida, que nos obliga a cambiar el modo en que enfocamos nuestros negocios, y de la que no saldremos si no repensamos nuestra relación con la naturaleza”. En este sentido, ha adelantado que “la alimentación será un tema social y políticamente relevante en los próximos años”.
De hecho, Faber ha considerado que “las democracias están en peligro si no encontramos maneras de ser más inclusivos a la hora de tratar los impactos sociales y económicos de esta crisis”. En relación a las consecuencias que esto tendrá sobre el sector alimentario, ha remarcado la importancia de mantener el trabajo conjunto de toda la cadena, que permitió garantizar el abastecimiento de las tiendas durante el confinamiento.
Por otro lado, Faber ha asegurado que “esta mirada más amplia e inclusiva” en la forma de hacer negocios de la industria alimentaria no solo será una iniciativa sectorial, sino que vendrá empujada por los propios consumidores. “Los usuarios piden mucho más a las marcas; quieren saber quién hay detrás de las empresas y cómo los acompañamos en esta crisis sanitaria, económica y social, por lo que debemos liderar este camino”.
De cara al futuro, el director general de Danone ha asegurado que “los consumidores están descubriendo nuevas realidades sobre la alimentación que están llevando a una concienciación que no va a desaparecer”. En la misma línea argumental, ha avanzado que “esta crisis va a durar lo suficiente como para cambiar nuestra forma de vida”.
Familia Torres advierte de los desafíos que trae la crisis
El Congreso Aecoc ha acogido también este miércoles también la participación del director general de Familia Torres, Miguel Torres, quien ha alertado de los desafíos que nos esperan tras la crisis del Covid. En su opinión, la crisis climática viene “sí o sí” y será necesaria una mayor implicación para adaptarnos y superarla. Tal como expresó, “superado el Covid, deberemos implicarnos en la crisis climática; dependemos de la agricultura, la naturaleza nos da todo”.
En este sentido, destacó la imparable presión del consumidor como impulsor fundamental de los cambios y la necesidad de establecer un mayor liderazgo político y concienciación en el conjunto del personal de las empresas al respecto.
En cuanto a los principales desafíos en este ámbito, señaló la medición de la huella de carbono como punto de partida fundamental (Bodegas Torres espera alcanzar la neutralidad en 2050) y la reorientación del modelo productivo, que en la actualidad acoge sistemas intensivistas y maximalistas que empobrecen la tierra, que es el máximo órgano de fijación de carbono que tenemos.
Preguntado por el impacto de la crisis del Covid en la compañía que dirige, Miguel Torres reconoció una reducción del mercado hostelero y turístico español superior al 40%. Por el contrario, el canal alimentación “ha funcionado muy bien y el digital se ha disparado con crecimiento de dos dígitos de forma continuada”. Asimismo, destacó las fortalezas del carácter familiar de su compañía para afrontar las dificultades. Claves entre las que se encuentran “la visión a largo plazo, la resiliencia, el foco en futuras generaciones, el endeudamiento bajo, la prudencia y la autofinanciación”.