En la carta, el presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafaurie Rivera, también pide a ese despacho la implementación de la salvaguardia bilateral, basado en el Decreto 1820 del 26 de mayo de 2010 “Por el cual se establece el procedimiento para la adopción de medidas de salvaguardia bilateral en el marco de los acuerdos comerciales internacionales”.
Esta solicitud es el primer paso para aplicar las salvaguardias bilaterales pactadas en los distintos acuerdos comerciales internacionales vigentes para Colombia. Luego del envío de la petición, la Subdirección de Prácticas Comerciales deberá informar, por escrito, a Fedegán si ha recibido de conformidad o si requiere más documentos o información (artículo 7 del Decreto 1820 de 2010).
En la misiva, Lafaurie Rivera manifiesta que el presunto daño grave causado a los lecheros colombianos se debe a las “importaciones de leche en polvo que se realizan en el marco del Tratado de Libre Comercio vigente con los Estados Unidos de Norteamérica, que ingresan al país por la partida arancelaria 0402 y que ocasionan un daño grave a esta rama de la producción nacional”.
El dirigente gremial pide que se impongan los derechos provisionales y definitivos a las mencionadas importaciones, en la cuantía que determine la Dirección de Comercio Exterior. Los fundamentos de la solicitud son los siguientes:
– Que las importaciones de leche en polvo realizadas bajo el Tratado de Libre Comercio vigente con los Estados Unidos se realizan en condiciones y cantidades que generan un grave daño a la producción de leche en Colombia.
– Que las condiciones y cantidades de leche en polvo importada de los Estados Unidos han tenido un incremento significativo que ha provocado una pérdida de dinámica importante en la tasa de crecimiento del acopio formal de la leche líquida a los productores nacionales.
– Que el sector industrial transformador se ha visto motivado a incrementar sus compras internacionales de leche en polvo, en virtud de la reducción a la protección arancelaria con la que contaba el sector lechero en país previo a la entrada en vigor del acuerdo con los Estados Unidos, en detrimento de la producción rural colombiana.
– Que la forma en la que se negoció la administración de los contingentes arancelarios preferenciales bajo la modalidad de primer llegado, primer servido, se ha convertido en un incentivo perverso para que cantidades similares al contingente de cada año, arriben al país en las últimas semanas del año inmediatamente anterior, con el fin de realizar la nacionalización de esta leche a partir de las primeras horas del 1° de enero de cada año y acceder a las condiciones arancelarias preferenciales concedidas en el tratado de libre comercio, generando una sobreoferta que atenta contra la estabilidad y viabilidad de la producción lechera en el país.
– Que se evidencia un deterioro importante en los precios pagados al productor primario de leche líquida en razón al incremento constante de las importaciones de leche en polvo en el marco del acuerdo de libre comercio vigente con los Estados Unidos.
– Que se evidencia el daño sufrido a los productores nacionales en virtud del ingreso creciente de las importaciones de leche en polvo, en razón a que en efecto, los precios pagados al productor no son superiores a los registrados en el año 2012, año de entrada en vigencia del tratado de libre comercio con los Estados Unidos, se han mantenido constantes, a diferencia de lo experimentado frente a los costos de producción, los cuales en efecto, sí han subido de manera importante.
– Que se hace necesario atender el grave daño causado a la producción de leche en el país, a través de los instrumentos de defensa comercial acordados en el Tratado de Libre Comercio vigente con los Estados Unidos, como lo es la cláusula de salvaguardia.
Las cifras de importaciones de leche en polvo y derivados lácteos por parte de la industria durante 2020 fueron las mayores de los últimos años: 73.663 toneladas por USD 203,5 millones, un crecimiento de 19,5 % en volumen y 29,8 % en valor con respecto a 2019 (61.643 toneladas por USD 156,7 millones). A Estados Unidos se le compró el 55 % y a México el 11 %.
Por otra parte, el contingente de 12.969 toneladas para 2021, en el TLC con EE. UU., fue agotado a los pocos días de iniciar este año, tras lo cual, como ha sucedido en años anteriores, se continuará comprando a ese país, ya no con arancel cero, sino con la tarifa extracontingente pactada, de apenas el 11 % para esta vigencia, muy llamativa para los importadores.
Por esta razón, a la solicitud realizada por Fedegán se sumó la Cámara Gremial de la Leche, órgano que reúne los más importantes gremios regionales y locales de productores de leche, así como a las asociaciones nacionales de razas de ganado lechero del país.
Hubo también gremios que enviaron cartas similares a la Dirección de Comercio Exterior: Asociación Colombiana de Criadores de Ganado Cebú (Asocebú), Asociación de Ganaderos de la Costa Norte (Asoganorte), el Comité Departamental de Ganaderos de Bolívar, el Comité Departamental de Ganaderos de Caquetá, la Asociación de Ganaderos de La Guajira (Asogagua), el Comité de Ganaderos de Norte de Santander (Coganor), la Cooperativa Multiactiva de Productores de Leche de María La Baja (Coolema), el Comité de Ganaderos del Banco Magdalena (Cogabán), el Comité de Ganaderos del Bajo Sinú (Ganabas), el Comité de Ganaderos de Becerril (Cesar), la Fundación Agropecuaria (Fungacam) y Asopegatur Ltda., entre otros.