El vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) y titular de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), Daniel Funes de Rioja, aseguró que el próximo gobierno deberá encarar la reforma laboral, sin importa cuál sea el precandidato que se imponga en las elecciones generales.
FUNES DE RIOJA. Tiempo atrás. (Télam/Archivo)

“Esto va a tener que suceder con quien quiera que venga”, afirmó Funes de Rioja este miércoles en declaraciones a Futurock.

“Quien venga no puede soslayar esto. Un país con 40 por ciento de trabajo en negro y más de la mitad del empleo en el sector público es un país que no va a funcionar, salvo con el milagro de la soja a 600 dólares”, profundizó.

En ese sentido, Funes de Rioja afirmó que son varias las reformas necesarias para que la Argentina pueda insertarse en el mundo y ser competitiva, en particular teniendo en cuenta el acuerdo alcanzado entre el Mercosur y la Unión Europea.

“Hay que hacer la reforma fiscal y la de costos logísticos, dado que somos fuertemente dependientes de costos muy altos que afectan al mercado interno y exportaciones”, señaló el vicepresidente de Asuntos Laborales e Internacionales de la UIA.

Por otra parte, dijo que la inflación y las altas tasas de interés no son sostenibles en el largo plazo. “Argentina tiene que hacer los deberes para ser un país normal”, sentenció.

Con respecto a la reforma laboral, Funes de Rioja sostuvo que tiene que haber “una nueva visión”.

Al respecto, opinó que el sistema laboral argentino responde a la primera y segunda Revolución Industrial, a un esquema fordista y taylorista de la organización de la producción.

“Hay que ver cómo resolvemos los vicios del sistema. Hoy la tecnología está cambiando a una velocidad monumental. Seguir reinvindicando convenios del ‘75, es nostalgia. Hay convenios que tienen adicional por ‘computación’. Eso es una conquista decimonónica”.

Sobre la coyuntura económica

Al respecto de la situación que atraviesa la economía argentina, Funes de Rioja pidió mirarla teniendo en cuenta que se acercan las elecciones presidenciales y eso tiene repercusiones.

“Hay que mirar la película y no la foto”, sostuvo. “Una elección que parecería que es abierta en cuanto a su resultado, obviamente influye en los mercados, en la inversión y más cuando la economía está saliendo de un pozo que llevó a que el año pasado estuviéramos cerca del 50% de utilización de la capacidad instalada”, agregó.

Sobre la situación de la industria, Funes de Rioja dijo que “hay cuatro sectores que están mejor, pero hay veinte que no”. En cuanto a la alimentación, describió su panorama como “menos dramático” pero variado.

“De los 37 sectores de la alimentación hay algunos como carnes vacuna, cerdo y pollo que están mejor; arroz, yerba, té, leche en polvo y sobre todo pesca, muy bien; algunos que han dejado de caer y eso genera cierta expectativa; y otros que están con mayor contracción, por ejemplo bebidas sin alcohol, que está más resentido”, concluyó.

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