Central Genética Alicante fue reconocida por la Asociación Colombiana de Criadores de Ganado Cebú (Asocebú) como la finca número uno de la región Caribe en la categoría de más de 500 ejemplares gyr.
El ingeniero de minas Luis Alejandro Aparicio, el administrador agropecuario Rolando Reyes y el oncólogo Manuel González se juntaron con un mismo propósito: desarrollar una ganadería especializada, moderna y rentable desde la Costa Caribe para ofrecer genética de alto valor para Colombia y el mundo.
Así nació Central Genética Alicante, una empresa que desde su fundación estableció un principio enfocado en que cada socio tendría un rol bien definido y así ha sido.
En palabras de Aparicio, “Rolando se encarga de la parte técnica, Manuel de la administrativa y yo de la comercial”. Esta estructura ha permitido un trabajo disciplinado y enfocado que ha rendido frutos en tiempo récord.
Aunque como empresa formal tienen seis años, los socios suman más de tres décadas de experiencia criando gyr lechero puro.
Genética con trazabilidad
En esta compañía, la genética no es un accesorio, es el eje del negocio. Reyes explicó que “nos basamos en la selección de vacas con mérito genético alto, incluidas en el programa de genómica de Asocebú Colombia, utilizando toros probados para garantizar las transmisión de ese potencial”.
Esta empresa se caracteriza por aplicar inseminación artificial a tiempo fijo (IATF), fertilización in vitro (FIV) y transferencia de embriones (TE) para lograr una reproducción de los mejores ejemplares. Esto les permite comercializar animales con alto valor genético, trazabilidad y respaldados con información de reproducción y producción reales, garantizando al comprador un producto con alto valor agregado.
Rusticidad en el Caribe
Instalada en la sabana del departamento de Córdoba, Central Genética Alicante ha comprobado que la raza gyr, originaria de climas extremos en la India, se adapta de forma sobresaliente a las duras condiciones del trópico ecuatorial. González aseguró que “la raza gyr no es una moda. Es rústica, productiva y rentable”.
Frente al cambio climático y la variabilidad ambiental, han implementado sistemas de conservación de forrajes, una pista de alimentación y estrategias de suplementación para garantizar el rendimiento del hato, a lo largo de todo el año.
La leche A2A2
Los objetivos de la empresa siguen creciendo. Uno de los más ambiciosos es el desarrollo de la vaca tipo CGA (Central Genética Alicante), basada entre otros, en un programa de clasificación lineal y bovinometría con el respaldo de Asocebú. Esta iniciativa busca consolidar ejemplares con características deseables y homogéneas que respondan siempre mejor a las condiciones del trópico ecuatorial.
Además, ya cuentan con un “75 – 80 % del hato positivo para leche A2A2, la cual es una variedad que contiene la proteína beta – caseína A2, que es más fácil de digerir mejorando la salud intestinal y ósea. La meta es producirla en alianza con una cooperativa regional”, afirmó Aparicio.
Y por último, si bien ya son un hato libre de brucelosis y tuberculosis, quieren avanzar hacia la certificación de sostenibilidad, consolidando su compromiso con el bienestar animal, el medio ambiente y la seguridad alimentaria.
El primer puesto
Asocebú, la principal entidad nacional para el control y promoción de razas cebuinas, identificó 817 haciendas activas con un total de 51.964 ejemplares y lanzó en 2024 un ambicioso sistema de clasificación técnica de fincas que evalúa factores productivos y reproductivos en explotaciones de todo el país. Divididas por zonas geográficas y tamaños de los hatos.
Central Genética Alicante fue evaluada en la región Caribe en la categoría de más de 500 ejemplares y se quedó con el primer puesto. La evaluación se basó en el Índice Total de Fincas Élites (OITFE), que pondera variables como el intervalo entre partos, datos de pesajes de crías, la edad al primer parto y la producción de leche.