En la Unión Ganadera Regional de Puebla (UGRP) denunciaron que al menos 10,000 productores de leche están atravesando una crisis, la cual se debe a las desmedidas importaciones de leche, tema que no ha sido atendido aún por el Gobierno Federal.

Ángel Minutti Lavazzi, líder de los agremiados en la entidad, expresó que estas compras al extranjero derivan en que la industria procesadora no quiera pagar más por el líquido, ofreciendo actualmente seis pesos por litro.

De acuerdo con la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche), después de China, nuestro país es el segundo principal importador de leche a nivel mundial al absorber 21% del comercio internacional de dicho alimento.

El presidente de la UGRP expuso que estos seis pesos ofertados por las empresas representan casi en su totalidad el costo de producción, lo que ha llevado a los ganaderos a perder su rentabilidad, viéndose orillados incluso a vender sus vacas.

Señaló para el diario El Economista, que esta situación ha ido empeorando desde 2011, por lo que el empleo en el sector se ha contraído hasta en 40% durante este periodo, mientras que los sueldos del personal se han reducido a la mitad.

Por este motivo, hizo un llamado a las autoridades estatales para desarrollar políticas públicas que ayuden a garantizar la permanencia del sector lechero en el mercado local, y que éstas contemplen el establecimiento de centros de acopio para la refrigeración del lácteo.

Vicente Gómez Cobo, presidente de Femeleche, advirtió que si las autoridades federales no toman acciones para impulsar la productividad local y frenar las importaciones, para 2050, aproximadamente 50% del consumo mexicano será solventado a través de estas compras.