Así lo señaló Rodrigo Gallegos, director del Centro de la Industria Láctea del Ecuador (CIL), que es una organización gremial de la que forman parte 10 firmas.
“Muchas industrias que canalizaban por allá sus productos, han tenido mermas importantes en lo que es la producción. Todo el canal de los alimentos preparados con base en lácteos no está trabajando en las mismas condiciones y eso evidentemente afecta a toda la cadena”, dijo.
Gallegos agregó que, para solucionar en algo esos inconvenientes, se ha llegado por ejemplo a acuerdos con otras industrias para equilibrar el manejo de la leche.
El mayor interés del gremio es que no se deje de consumir y adquirir leche porque la producción continúa.
El CIL también le apuesta a que continúe la atención de la tienda de barrio para evitar la aglomeración de personas en supermercados y se mantenga así ese motor de desarrollo económico.
Acerca del manejo de salvoconductos, el dirigente gremial, respondió que se han presentado varios inconvenientes. Esto porque se suponía que la cadena alimentaria no debería tener problemas para movilizarse. Sin embargo, agregó, hay contradicciones entre Policía Nacional y agentes de tránsito, en algunas ciudades.
Una alternativa que han aplicado es la presentación de la afiliación al Seguro Social para corroborar que son empleados de las empresas del sector lácteo.