La Cámara Nacional de Industrias (CNI) expresó este lunes su profunda preocupación ante la crítica situación que atraviesa actualmente la industria láctea, provocada por la regulación de precios de la leche y su pedido de ampliación por 15 años del Fondo Proleche. Esta combinación de medidas genera un serio desequilibrio en toda la cadena productiva del sector, afectando tanto a empresas como a consumidores bolivianos.
“Evidentemente, la actual normativa del Fondo Proleche ya no responde al equilibrio de costos y precios de la leche que debería existir entre productores, industria y consumidores, ya que además del sostenido aumento en los costos de insumos, el Gobierno modificó en septiembre de 2024 la banda de precios de la leche cruda que los productores venden a las industrias, sin autorizar a las mismas industrias un incremento en el precio de venta al público, el cual se mantiene congelado desde hace más de una década”, señala un comunicado de la CNI.
En ese sentido, alertan que esta situación está generando pérdidas millonarias anuales, comprometiendo la sostenibilidad del sector, el empleo y el abastecimiento diario de productos lácteos a la población. Además, consideran que los recientes ajustes provocan un grave desequilibrio de precios entre productores y empresas, obligando a estas últimas a absorber impactos económicos que ponen en riesgo su continuidad.
La CNI también cuestionó el pedido de ampliación del Fondo Proleche por otros 15 años sin una socialización previa ni un balance transparente de los resultados obtenidos durante sus 13 años de vigencia.
“Cualquier modificación debe contemplar una revisión integral de la normativa, para evitar consecuencias negativas sobre la industria”, sostuvo la entidad.