Así como si estuviera viendo un cuento de hadas por televisión, en donde la música clásica siempre suena para algún baile, así mismo pasa en los corrales y espacios donde ordeñan los animales en la Cooperativa La Fageda, liderada por el psicólogo y presidente de esta compañía, Cristóbal Colón.
En varios medios españoles, Colón ha brindado entrevistas en las cuales menciona que “en muchas horas del día acariciamos a las vacas con música barroca porque son una de las protagonistas fundamentales del proyecto y por eso las intentamos cuidar porque dan buena o mala leche, y de mala leche hay mucho en el mundo”.
Antes de abordar mejor esta historia hay que destacar que la Fageda es un proyecto social que en el que se elaboran productos a base de ingredientes naturales y procesos artesanales, con la intención de ofrecer siempre la máxima calidad.
Desde que iniciaron a trabajar en este negocio de lácteos en 1992, se está produciendo un yogur de granja que es insignia en la sociedad española, por lo cual la compañía ha ido incorporando nuevas referencias de productos lácteos como los postres y helados.
Gracias al reconocimiento que tienen, han puesto en marcha procesos de elaboración y materias primas que les han permitido lanzar al mercado las últimas novedades que son las mermeladas y los yogures cremosos.
El servicio de jardinería, la ganadería de vacas lecheras, la elaboración de productos lácteos, helados y mermeladas o el servicio de atención al visitante son las actividades empresariales que permiten que La Fageda siga avanzando.
Cristobal Colón menciona que “nosotros hacemos un excelente yogur y hace 30 años que estamos en el mercado, teniendo en cuenta que hemos montado una empresa para dar trabajo a unas personas. Normalmente las empresas se construyen para producir cosas y después se contratan personas”.
De acuerdo a Colón, “nosotros no estamos aquí para hacer yogures, nosotros hacemos yogures para que esas personas tengan una vida más coherente y más digna”.
Esta empresa ha sido reconocida en la sociedad española porque no solo dedica su actividad a la producción de productos manteniendo una rentabilidad, sino que también cuentan con un objetivo social muy marcado.
“Además de la actividad económica empresarial tenemos viviendas, tenemos programas de formación, programas de ocio”, comenta Colón. El objetivo de La Fageda es dignificar la vida de personas con discapacidad intelectual, trastornos mentales severos y otros colectivos vulnerables como menciona el portal Aleteia.
Colón emprendió una aventura encomiable al crear el “trabajo con sentido” para personas con enfermedades mentales, siendo esta la receta de los ricos yogures de La Fageda que cumplió este 2022 sus 40 años.
El inicio del proyecto
La historia de esta empresa comienza en España en los años 80s. Colón cuenta que por diez años trabajó en varios hospitales e instituciones psiquiátricas con la intención de arrancar a estas personas de la pasividad del patio del manicomio.
Por eso, puso en marcha un proyecto empresarial con alma, donde todos tuvieran la posibilidad de desarrollar sus potenciales realizando un trabajo útil, remunerado y hecho en equipo.
El fundador inició con la empresa Olot, produciendo imaginería religiosa y luego otro tipo de actividades como la jardinería que al día de hoy se mantiene. Esto les dio pie para ubicarse en el parque natural de La Garrotxa en donde había vacas que dispusieron para producir leche.
Pero en el año 1991, con la cuota láctea de la Unión Europea, se vieron obligados a dejar de producir leche, entonces comenzaron a elaborar yogures, comenzando con la fabricación de un producto natural de granja de alta calidad, tan delicioso como solidario, tal como lo expresa Colón.
Las vacas felices. El verdadero secreto
El imaginario común es que esta cooperativa cuenta con un extenso número de vacas, pero la realidad es que no. Sin embargo, si son de una excelente genética y tienen certificación de bienestar animal Welfair. Esta certificación se obtuvo porque en la empresa cuentan con espacios amplios para cada uno de los bovinos, zona para las vacas de cría, sesiones de música clásica, sistema de aspersión de agua para combatir las altas temperaturas del verano y garantizar que las vacas sean felices cuando están a pasto al aire libre.