En diálogo con PERFIL, Gustavo de la Vega, Director de compra de materia prima láctea de Mastellone Hnos, comentó que “el simposio tuvo como objetivo llevar un poco de claridad a una situación incierta. Lo único que podemos hacer nosotros, tanto como industria como producción para sobrellevar estos obstáculos es ser cada día más eficientes, ampliar nuestros horizontes de productividad. Tecnología y sustentabilidad son dos pilares claves para el crecimiento sustentable en el tiempo y que garantice la permanencia de los tambos en la actividad”.
En cuanto al cierre del año, el director de Mastellone Hnos. señaló: “El balance del cierre del año es bueno. Veníamos de un 2018 con un precio que no era el mejor y generó que se achiquen los stocks ganaderos, se le saque el acelerador al tema de la comida y, como en toda actividad biológica, la recuperación no fue instantánea. Arrancamos el año con poca leche, a lo que se le sumó un verano con mucho calor, generando una caída muy fuerte en la producción, que terminó impactando en escasez con la consecuente levantada de precios. Antes de la devaluación de agosto se estuvo pagando 35 a 36 centavos de dólar, un excelente precio que derivó en un reacomodamiento productivo. A pesar de que el primer cuatrimestre de este año estuvo muy por debajo, la producción total aumentará entre un 2 y 3% sobre los 10.500 millones de litros del año pasado”.
Con respecto a las turbulencias económicas relacionadas con el escenario electoral, De La Vega sostuvo que “se nos ha planteado un panorama con bastante incertidumbre, que no es bueno ni malo en sí mismo, sino que simplemente desconocemos qué viene hacia adelante. En definitiva, terminamos un buen año en términos económicos y conformes que pudimos brindarle al productor un buen precio acorde con lo que se merece y le permite seguir trabajando. Obviamente, después de la última devaluación, el precio en centavos de dólar por litro ha caído pero lo estamos tratando de recomponer con el tiempo que eso lleva”.
