Las ayudas anunciadas por el Gobierno para los productores de leche incluidas en el “Plan nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania” son bienvenidas por los ganaderos pero mantienen que no dejan de ser “un parche”. El ministro Planas anunció el martes que estos productores, de vacuno, ovino y caprino, recibirán 169 millones de euros en ayudas directas.
Jesús Sánchez, presidente de la Asociación provincial de raza Frisona y propietario de una explotación de vacuno de leche en Encina de San Silvestre, señaló que lo importante “es que aumenten los precios. Viene bien la ayuda, pero lo importante es que paguen más por la leche”. En este sentido, señaló que las conversaciones con la empresa sí apuntan a esa subida que llevaría el precio hasta los 42-43 céntimos el litro desde los 36 actuales. “Sería una subida que no se aplicaría hasta abril, luego pagan a los 45 días de entregar la leche pero si fuera a 43 compensaríamos algo los costes porque ahora pagamos al menos el doble por todo”. “Ven que queda poca leche y que se quedan sin ganaderos”, apunta.
Los ganaderos de vacuno de leche creen que las ayudas podrían compensar que no les subirán la leche en marzo pero advierten que es una medida pensada sobre todo para explotaciones de Cantabria o Galicia, con un número medio de vacas próximo a los 40 ejemplares. En Salamanca está en torno a las 70, con alguna incluso con 400, y al disminuir la cuantía de la ayuda cuanto mayor es el censo, beneficia a los más pequeñas.
Las ayudas del Gobierno son de 210 euros por animal en explotaciones de hasta 40 reses. Los ganaderos que tengan entre 41 y 180 cabezas cobrarán 145 euros por vaca; y las granjas con una cabaña superior a las 180 vacas, 80 euros por cada una. El tope por explotación es de 35.000 euros y el total de la ayuda, 124 millones de euros.
Los productores de leche de oveja recibirán 32,3 millones de euros, 15 euros por animal. Los de cabras, 10 euros por cabra, con 12,7 millones de presupuesto.
