Tras un 2024 para el olvido para el sector lácteo, sobre todo en lo que tiene que ver con el mercado interno, enero arrancó con buenas noticias en lo que respecta a este frente o, por lo menos, no continuó con las malas.
Según el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), las ventas de productos lácteos en enero tuvieron un marcadísimo rebote interananual del 17,4% en volumen y del 15,6% en litros de leche equivalente. Asimismo, se registró un avance del 7,4% respecto a diciembre.
“Ya se venía marcando en los últimos meses una importante desaceleración en la caída interanual del primer semestre de 2024, y se consolida la recuperación en el acumulado del año y en este inicio de 2025”, indicaron desde el OCLA.
Pero en este sentido, cabe aclarar que este aumento responde, mayormente, a que enero de 2024 fue un mes donde la caída del consumo fue del 17,7%. O sea, la base de comparación es bajísima y, si tomamos en cuenta que este mes crecieron las ventas un 17,4%, se puede decir que el crecimiento no fue real, sino que básicamente se volvió a niveles de principios del año pasado.
Así, por ejemplo, las ventas de leches fluidas crecieron 13,1% interanual, mientras que las leches en polvo lo hicieron por 33,2% y los quesos mejoraron en un 10,6%.
Para el OCLA, “esta situación sin duda se da por un fuerte deterioro de los niveles de ingresos reales, fundamentalmente de los segmentos medios de la pirámide de ingresos, lo cual, al margen de reducir el volumen de consumo, afecta el valor del mix de ventas haciendo que se facture un menor valor en las ventas internas, que claramente reflejamos en los análisis de la cadena de valor cuando mencionamos los bajos valores del VLE Mercado Interno en dólares respecto a otros países”.
El mercado lácteo y la situación cambiaria
Para el OCLA, la situación cambiaria, en donde se registra un atraso en el valor del dólar respecto al peso, “hace peligrar el destino externo de la producción, a lo que hay que sumar que la producción se viene recuperando en términos interanuales. Por lo tanto, hay que prestar mucha atención al frente interno”, dando a entender que una situación de sobreproducción y, por ende, sobreoferta puede darse en los próximos meses .
Por eso, entienden que “es fundamental que continue el proceso de convergencia de los precios de los productos lácteos (estabilización) en el mercado interno con la suba de salarios (incremento del poder adquisitivo) para que no se genere una sobre oferta en el mercado doméstico en los próximos meses, aunque estemos en el período en que la producción va hacia el pico estacional de mínima (feb-abr)”.
“Y es importante ello, ya que en el frente externo y a pesar de los buenos precios internacionales, no hay gran expectativa en las exportaciones debido al fuerte retraso cambiario, qué dicho sea de paso, se incrementa con la baja del crawling peg del 2 al 1% mensual. La caída de las exportaciones en enero 2025 en un 21% en litros de leche equivalentes son una muestra acabada del deterioro cambiario, que tal vez podría mejorarse con la restitución de los reintegros de impuestos internos y en su incidencia plena”, concluyó el trabajo.
