Durante el año pasado, se posicionó en uno de sus niveles más bajos en la última década. A esto se le suma el factor nutricional. Según un estudio realizado por Kantar para Mastellone Hnos, el 86% de los argentinos consumen menos porciones de lácteos de lo recomendado por el Ministerio de Salud.
“Vemos el tema con interés y preocupación”, señalan desde la compañía láctea. El relevamiento arrojó que el 6% de la población no contempla ningún tipo de lácteo en su ingesta diaria, mientras que el 19% consume menos de una porción, la cual equivale a 200 mililitros de leche, 200 gramos de yogur o 30 gramos de queso. Solo el 9% consume un volumen acorde a la recomendación, que es de tres porciones. “El consumo vemos que es menor en el estrato de 18 a 34 años, pero no se modifica por regiones”, detalla Mariana Souto, directora de los servicios ómnibus de la división Insights de la consultora.
Según Mónica Katz, presidente de la Sociedad Argentina de Nutrición y moderadora de la presentación del estudio, en el cual El Cronista estuvo presente, la tendencia de consumo “es estable con una tendencia hacia abajo”. No obstante, aclaró que esto tiene que ver con un fenómeno a nivel mundial y no algo particular de la situación económica argentina, aunque remarcó que la crisis suele ser un factor de impacto. “El precio también es un driver de consumo”, apunta. Además, la especialista apuntaló que las empresas del sector deberían trabajar desde la comunicación para revertir la tendencia.
La cifra per cápita se encuentra en su número más bajo desde 2006. Según el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), en 2018 se registró un consumo de 190 litros por habitante al año, unos 5 litros menos que el año anterior y 10 litros menos que en 2016. Esto impactó también en los puntos comerciales que sintieron la caída en las ventas de los productos lácteos. El desplome fue del 14% en unidades vendidas durante el primer cuatrimestre del año, de acuerdo a un informe de la consultora Focus Market vía Scanntech. En tanto, durante el mismo período, los precios de esta categoría subieron un 61,1%, siempre según el mismo reporte.
“Nosotros estamos en un año particular que va un poco a contramano de lo que marcan los datos de consumo general en la población. En ventas no estamos mal en lo que va de este año, aunque si lo vemos en un plazo un poco más largo, sí desde hace unos años el consumo viene lentamente cayendo y nuestras ventas también”, señala Alejandro Castelli, gerente de Comunicaciones de Mastellone Hnos., ante una consulta de este medio. Y agrega: “Esto viene acompañando el contexto general del país, tal vez se está yendo hacia el consumo de productos más básicos”. A su vez, afirmó que la industria está trabajando junto al Gobierno para la creación de una mesa de promoción del consumo de leche, al igual que se instaló para el sector frutihortícola hace unos años, aunque todavía se encuentra en una etapa incipiente.
La firma dueña de La Serenísima reportó ventas acumuladas en el mercado interno por 1302 millones de litros de leche en 2018 en su balance anual, un 5% menos que el año anterior. Por su parte, durante el primer trimestre de 2019 registró $ 8601 millones en ingresos por productos lácteos, lo que marca un incremento del 56,8% respecto al mismo período del año pasado.