Un informe elaborado por economistas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) reflejó el crecimiento que registraron en los últimos tres años las exportaciones de productos lácteos, en relación a los demás sectores que se encuentran agrupados en las Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA).
Al respecto, se destacó que en el segundo semestre de 2019 el complejo lechero creció un 34%, y desde entonces ha mostrado cierta variabilidad en sus incrementos, y donde en la primera mitad del corriente año registró un incremento de un 22,5%. Además, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) proyecta que el sector lácteo será el de mayor expansión hasta 2031, con un crecimiento del suministro mundial del 23%.
A todo esto se suma el buen escenario de precios internacionales, que derivó en mayores ingresos de dólares al país. Al respecto, el informe privado señaló que en el primer semestre del presente año se remitieron al exterior manufacturas del sector lácteo por el equivalente a USD 646 millones, un aumento del 36,9% interanual, unos USD 349 millones más que en mismo período de 2019 y transformándose en el mayor ingreso desde 2014, cuando se ubicó en USD 697 millones.
Por otro lado, los economistas de la Bolsa de Rosario explicaron que el aumento de las exportaciones también es por el aumento de los valores internacionales de la leche en polvo, que está alcanzando en lo que va del 2022 un nivel récord. “Si observamos el índice de precios de los productos lácteos, éstos han mantenido una firme escalada desde junio de 2019 que se muestra menos alcista en el último bimestre de 2022 ya que existen preocupaciones en torno a los escenarios recesivos tanto en Estados Unidos como en Europa, lo que podría incidir negativamente en los precios de todos los alimentos”, explicaron los especialistas.
En ese sentido, se aportaron datos de la FAO que sostienen que los precios mundiales están aumentando por “la fuerte demanda de importaciones, la persistente escasez de la oferta mundial y los bajos niveles de existencias. En lo que va del año, este índice siempre se mantuvo por encima de lo ocurrido en los últimos tres años”. Si bien se aguarda que el valor de la leche en polvo disminuya, igualmente se mantendría en cifras superiores a los promedios de los últimos 5 años. En la segunda semana de julio se registró una caída en el Mercado de Futuros para la leche en polvo entera, cotizando en agosto/2022 por debajo de los USD 3.800 la tonelada, algo que se mantendría en las proyecciones de los próximos meses.
Contexto
La lechería es una de las actividades agropecuarias más tradicionales y arraigadas en el campo argentino y también una parte muy importante de su economía y entramado productivo. No obstante su impronta, también es uno de los rubros que en las últimas décadas viene mostrando inestabilidad y crisis de rentabilidad recurrentes, llegando inclusive a atravesar períodos largos de quebranto. Lamentablemente, hoy el rubro vive un duro presente, donde el precio pagado al productor subió muy por debajo de la inflación, mientras que los costos se dispararon.
Al referirse al contexto local, los economistas de la BCR advirtieron sobre la fuerte suba de los costos de producción en el primer semestre, especialmente como consecuencia del incremento de los commodities internacionales. Además, según el informe privado, en términos de ingresos el valor del litro de leche correspondiente al mes de junio, mejoró en torno al 5%, igualando el incremento de mayo. En valores absolutos, aumentó de 45,52 pesos a 47,81 y mostró una variación interanual del 52,6%.
Días atrás, los coordinadores de la Comisión de Lácteos de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Carlos Fuchs Facht y Raúl Catta comentaron que “el sector está muy complicado. En la cadena, somos el eslabón de menor rentabilidad”. En este sentido, agregaron que “el problema es el costo laboral que tenemos, por una lado, y el precio (pagado al productor) que no se acomoda y convalida la inflación, por lo que mes a mes vamos perdiendo contra ésta”, quedando complicada “la reposición de insumo comunes, como cubiertas o un mixer, que se han escapado en valor respecto a nuestra producción. Hoy existe un desfasaje entre el precio pagado al productor por la leche y la inflación en torno al 20% todos los meses y el mismo se explica porque la cadena láctea fue el sector que “más control ha habido con los Precios Cuidados”.
Por último, en el plano internacional el relevamiento de la Bolsa de Comercio de Rosario recordó que los insumos, como los fertilizantes para las pasturas, ya venían en niveles altos y se terminaron de disparar tras la invasión de Rusia a Ucrania. “Los menores embarques también impactaron en los precios y sumaron otro efecto negativo sobre los costos de producción, y los efectos de la sequía de principios de año condicionaron las reservas de maíz, haciendo encarecer aún más los gastos del productor”, comentaron.