Las importaciones españolas de leche y productos lácteos se mantuvieron estables en 2018 con respecto al año anterior, ligeramente por debajo de los 3 millones de toneladas de equivalente en leche, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Sin embargo, el desglose por productos muestra evoluciones diversas, ya que las de leche líquida disminuyeron de forma significativa (-27%) mientras que aumentaron las de productos muy importantes, como la mantequilla y los quesos.
Las exportaciones, por su parte, disminuyeron en un 5% considerando todos los productos, con grandes diferencias asimismo si se consideran por separado. Las ventas al exterior de leche en polvo, por ejemplo, se redujeron casi en un 50% respecto a 2017.
España sigue siendo un país importador neto de leche y productos lácteos
El Ministerio de Agricultura, que recoge estas cifras en su último informe de coyuntura del sector vacuno de leche, recuerda que España sigue siendo un país importador neto de leche y productos lácteos pero que en 2018 continuó la tendencia ya observada en años anteriores, con un balance comercial menos negativo.
En lo que respecta al valor de los intercambios, el informe del Ministerio precisa que el año pasado se registró una caída del 61% en la facturación por exportación del sector debido principalmente a la disminución de las exportaciones de leche en polvo.
El valor de las importaciones también bajó, en este caso en un 38%, por la caída de las compras de leche a granel en el exterior.
Francia es deficitaria de productos lácteos
Aunque es la segunda potencia láctea europea, Francia es deficitaria en productos lácteos. Solo el 71% de los que se consumen están elaborados a base de leche francesa, el resto se importa.
Responsables del Instituto de la Ganadería francés precisan que no se importa la leche entera para su transformación sino los productos lácteos. En el caso de la mantequilla las importaciones representan el 40% del consumo, en el de la nata el 34%, en el de la leche en polvo el 26% y en el caso de otros productos casi la mitad. El déficit es, sobre todo, de materia grasa, ya que en Francia se consume más materia grasa que materia proteica.
El equivalente en leche de los productos lácteos importados en Francia ascendió a 6 millones de toneladas. La producción francesa de leche fue ese año de 23,9 millones de toneladas.
