La Junta de Castilla y León ha trabajado intensamente en la búsqueda de alternativas para los ganaderos afectados por la situación de la cooperativa LAR. La mayoría de los productores leoneses que entregaban su leche a esta cooperativa ya han comenzado a trabajar con otras industrias lácteas. Sin embargo, la situación de los cinco ganaderos de las zonas de montaña requería una solución específica debido a su ubicación geográfica y las dificultades logísticas.
En coordinación con los ayuntamientos y los propios ganaderos, la Junta ha mantenido negociaciones con diversas empresas lácteas, logrando finalmente el compromiso de una de ellas para iniciar la recogida de la leche en condiciones similares a las que tenían anteriormente con la cooperativa LAR.