Las empresas lecheras CREA alcanzaron un resultado económico, medido como Ingreso de Capital (IK) promedio de U$S 261/Ha, frente a los U$S 263/Ha que habían registrado un año atrás. Con datos de 100 empresas CREA del área se observó que éstas bajaron de forma considerable sus costos, al tiempo que mantuvieron un resultado económico estable pese a la baja en el precio de la leche.
En el marco del Taller Anual de Gestión que se llevó a cabo en INIA La Estanzuela, se presentaron los resultados económicos de las empresas CREA lecheras correspondientes al ejercicio 2018/19. A su vez, en la actividad se llevaron a cabo diferentes charlas sobre perspectivas para el sector y el actual momento económico del país y de la lechería.
El coordinador lechero del área Inga. Agr. Mario Fossatti, explicó que de los datos presentados se destaca que “el ingreso se mantuvo, pese a la caída del precio de la leche, debido a que los productores lograron bajar los costos variables”.
Agregó que “el precio de la leche fue 11 % inferior al del ejercicio anterior” y que “para un rubro en el cual el 80 % de sus ingresos provienen del precio de la leche, es un impacto muy fuerte”, por lo que esperaban “una caída mayor a la que ocurrió” en el ingreso de las empresas. Destacó que, “lo más llamativo”, es que los productores bajaron los costos y aumentaron su productividad.
Dentro de los costos variables, lo más importante es que se bajaron considerablemente los gastos de alimentación, debido a que disminuyó el suministro y precio de los granos. También bajaron otros costos como sanidad e inseminación, aunque en niveles menores.
Agregó que a la baja de concentrados se sumó una mayor producción de forraje y un aumento de la productividad, por lo cual destacó el trabajo hecho por los grupos.
Del ingreso de capital obtenido (U$S 261/Ha), se debe restar una renta de U$S 92/Ha por superficie útil (por hectárea arrendada esta cifra asciende a U$S 190/Ha, intereses de deuda superiores a los U$S 50/Ha y los costos de vida del productor. “Las rentas se llevan un 34 % del ingreso de capital de las empresas, lo cual es un porcentaje muy alto de las ganancias de las mismas”. A su vez destacó que este año es mayor el área rentada que el área propia.
Fossatti explicó que en la última década aumentó mucho la demanda por tierra, llevando a un incremento en el precio de los arrendamientos. Teniendo en cuenta que el negocio agropecuario no es el mismo, consideró que las rentas deberían bajar.
En cuanto a la variabilidad de los resultados, destacó que ésta es muy alta. Las mejores empresas obtuvieron ingresos por encima de los U$S 700/Ha, mientras que las más negativas tuvieron pérdidas en el eje de los U$S 200/Ha. Esto provoca que haya una gran diferencia entre los que obtuvieron los mejores y los peores resultados, que rondan los U$S 900/Ha. Si se analizan los productores ubicados en el 25% inferior y los del 25% superior, la brecha ronda los U$S 400/Ha.
Analizando las empresas con malos resultados, se observan que son las que tienen insumos altos sin lograr altas productividades. “Estas empresas obtienen peores resultados que productores que gastan poco y producen poco”. En estos casos la prioridad debería ser bajar costos sin disminuir sus ingresos. También señaló que “La mayoría de ellos tienen un margen de incremento de productividad importante”.
Sobre las proyecciones hacia adelante, Fossatti dijo que se prevé un descenso en el ingreso de capital, ya que los productores creen que recibirán un precio de la leche que estará cerca de 2 centavos de dólar menos que el año pasado. Si bien esperan aumentar la producción, esto no compensaría la disminución del precio de la leche. “Estamos en un quinquenio con resultados mediocres en la lechería. Con este entraríamos en el sexto año”, puntualizó.
El precio de la leche en este ejercicio alcanzó los U$S 0,30/Lt , mientras que los costos rondaron los U$S 0,25/Lt. “La situación es muy difícil para los productores más chicos que deben conseguir producciones muy altas e ingresos superiores a los U$S 500/Ha para mantenerse dentro del negocio. Ahí tenemos un desafío fuerte para enfrentar”, sentenció.
Sólo el 48 % de las empresas CREA lecheras son capaces de remunerar todos los recursos que utilizan a precios de mercado.
NOTA. El Ingreso de Capital (IK) es una medida del resultado económico que asume que toda la tierra y todo el capital necesario para la explotación son propios, es decir que no se paga nada por la tierra o por el capital. También asume que el trabajo del productor y su familia es remunerado por un ficto. Permite comparar los sistemas de producción entre sí, pero no refleja la realidad financiera de las empresas.