Este fin de semana desaparecerán de los lineales de los supermercados marcas como Larsa, President, Ram o Puleva. Las cadenas de supermercados han pactado con Unións Agrarias retirar los brics de leche de los dos mayores grupos lácteos que operan en Galicia, Lactalis y Capsa, por el bajo precio que pagan a los ganaderos.

Los productores llevan varias semanas protestando contra las dos compañías debido a que el aumento de precio que aplicó la distribución en los establecimientos, es decir, lo que se paga en el supermercado por el producto, no ha repercutido en los ganaderos a los que recogen la leche, unos 2.200 productores en la comunidad. Según los datos de la Xunta, recogen cerca del 35% de la leche que produce Galicia.

Aunque en el sector lácteo hay contratos a largo plazo, el brutal incremento de costes derivado de los precios de la energía, pero también de los fertilizantes o la alimentación animal, ahoga a los ganaderos. Según denuncia Unións Agrarias, mientras otras industrias han accedido a aumentar los pagos, Lactalis y Capsa se han quedado la subida para ellos.

Acuerdo con los supermercados

Ahora, la organización agraria ha acordado con las principales distribuidoras un gesto simbólico de apoyo para este fin de semana, la retirada de productos de las dos compañías de los lineales. Según indican, las principales cadenas de distribución que operan en Galicia han accedido a aplicar la medida. Los cuatro principales grupos del sector en Galicia son Gadisa, Vegalsa-Eroski, Froiz y Mercadona, mientras que con cuotas más reducidas están Carrefour, Alcampo, DIA y Lidl.

En un comunicado, Unións Agrarias señala que Lactalis y Capsa son, tanto por el lugar que ocupan en Fenil como en la Interprofesional Láctea, también por el “importantísimo volumen de recogida que representan en Galicia”, las “principales culpables de la nula rentabilidad de las granjas a pesar de las grandes ganancias que obtienen por la comercialización de productos industriales”.

También lamentan que en el último año el precio por litro que cobran los ganaderos gallegos fue de media un céntimo inferior a la media estatal y que, en el caso de Capsa, sí que aumento los precios para los ganaderos asturianos, aunque no para las explotaciones de Galicia.