El mercado de la leche está cambiando, pero todavía el precio resulta muy alto en góndola e incluso falta variedad en la marcas que se ofrecen sobre todo en algunas cadenas de supermercados. Para analizar la realidad del sector, el Ingeniero Agrónomo Marcos Snyder habló a través de la 99.9 y señaló en primer término que «en febrero se recompuso mucho el precio de la leche al tambero después de 3 años de malos precios. Hay un reacomodamiento importante producto de la faltante y que hay una competencia que antes no había».
Aparecen a veces, momentáneamente las denominadas «segundas marcas» que están a un precio más bajo y el especialista en la materia también explicó porque sucede esto: «las usinas desarrollan técnicamente una segunda marca para cuando les sobre leche poder sacarla prácticamente al costo. Se transforma en una marca demandada cuando hay crisis, aunque es una leche que estratégicamente no se vende como la industria quiere hacer. Se ve agravado desde el año pasado cuando Sancor dejó de producir leche fluida a nivel nacional y quedó prácticamente sólo La Serenísima porque el resto son empresas regionales».
Hoy no hay segundas marcas en las góndolas y en muchos casos sólo se ofrece una leche: «a La Serenísima no le interesa vender leche a 26 pesos como estaba La Armonía y con el plan precios cuidados sacó La Martona que no la estaba usando por 10 o 15 pesos menor a la primera marca de La Serenísima».
De todos modos, en la actualidad, la leche no es un elemento importante en la alimentación de los argentinos, según las mediciones realizadas: «la leche es un alimento fundamental y uno tendría que tomar leche todos los días porque tienen componentes de calcio que son importantes, pero no tomamos tanta leche por día. Tomamos un promedio de 125 cc de leche fluida por día que es muy poquito», finalizó.