La situación de los ganaderos gallegos se ha vuelto insostenible. Llevan meses afrontando una subida de costes de producción que son incapaces de repercutir en el precio que perciben por sus productos y en la Consellería de Medio Rural consideran que ha llegado el momento de tomar medidas. Su titular, José González, convocó a las organizaciones profesionales agrarias, a las asociaciones y a las cooperativas del sector para poner sobre la mesa una batería de medidas. La primera, y más urgente, es pedirle al Gobierno central que active para toda España, tal y como hizo en su día el Gobierno italiano, una prima de emergencia estable de hasta cuatro céntimos por litro de leche para que los ganaderos puedan hacer frente a la subida de los piensos, la electricidad y el gasoil, entre otros insumos, y dejen de vender a pérdidas.
Según González, «a situación toronou moi preocupante» y en la consellería están ahora en poder de afirmar, tras haber analizado los datos, que la subida de los costes de producción en el sector ganadero es del 10 %. Eso implica que producir un litro de leche cuesta «ata catro céntimos máis por litro e producir un quilo de carne de vacún, ata 75 céntimos máis», añadió. Es por ello que el sector está inmerso «nunha situación de venda a perdas xeralizada», añadió. Algo que está prohibido por la ley de la cadena alimentaria.
El conselleiro propone pedir al Gobierno que tome medidas similares a las que han puesto en marcha otros países, como Italia. «Queremos que se impulse un gran acordo entre a distribución, os gandeiros e a industria que permita pechar unha prima de emerxencia para os gandeiros ou pensamos que imos ter problemas no sector», añadió. Argumenta que en el 2020 producir un litro de leche costaba 36 céntimos y que el pasado año esta cantidad se incrementó hasta los 40 céntimos. Por eso cifra en 4 céntimos por litro el coste que debería tener esa medida. «Está moi ben falar de Pertes, pero nestes momentos o que precisan os gandeiros e que se lle poñan cartos enriba da mesa para afrontar a situación», aseguró. Insistió, además, en que esta sería una medida excepcional, que se debería aplicar durante todo el ejercicio actual y que esa prima debería tener un tope de 41 céntimos por litro, excluyendo primeras de calidades e IVA. También quiso dejar claro que esos cuatro céntimos tienen que llegar íntegros al bolsillo del ganadero. «O incremento de custes é unha competencia que excede as competencias da comunidade autónoma e temos que adoptar medidas, do mesmo xeito ca o están facendo outros países europeos», reiteró.