Los precios de los lácteos repuntaron, consolidando las subas en los últimos remates de la neozelandesa Fonterra, pero eso no devolvió la competitividad a los productores de Uruguay y Argentina.
Tanto Oceanía como otros países productores de Sudamérica dependen de la demanda de China, principal importador mundial de lácteos y la reacción del gigante asiático se sigue haciendo esperar.
Uruguay mantiene el tercer lugar como exportador de leche en polvo entera a ese destino. La leche en polvo entera representó (hasta agosto) el 16% del total de las importaciones de China, medidas en dólares.
“La recuperación de la demanda láctea de China, hasta la fecha, no ha compensado el fuerte crecimiento de la producción interna de leche. El crecimiento de la producción de leche se desacelerará en la segunda mitad de 2023 y 2024, pero no se espera un reequilibrio completo del mercado en el corto plazo”, afirmó el economista agrícola senior Nathan Penny de Westpac Nueva Zelanda.
Más allá del repunte de precios, los valores continúan siendo bajos, destacó el especialista neocelandés, según publicó el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (Ocloa). En términos anuales, los precios de la leche en polvo y los valores generales de los lácteos bajaron 25% y 24% respectivamente.
Al analizar los datos de comercio exterior de China, el Instituto Nacional de la Leche (Inale) confirmó que el gigante asiático importó más leche en polvo descremada, quesos y sueros, pero bajó las compras de leche en polvo entera, fórmulas infantiles, leche y nata fresca. El principal proveedor de leche en polvo entera continúa siendo Nueva Zelanda (aporta 90% del volumen que compra China) y el segundo Australia. Las ventas de Uruguay apenas son el 1% del volumen importado.
En fórmulas infantiles, sigue dominando Holanda, seguido de Nueva Zelanda y Francia. En leche en polvo descremada, los tres principales vendedores son Nueva Zelanda, Australia y Estados Unidos. Las lácteas neocelandesas también son las principales proveedoras de quesos en China, sigue Australia y Estados Unidos. Entre enero y agosto de 2023, las importaciones de lácteos de China generaron US$ 8.899 millones. El economista de Westpac espera que la demanda no mejore hasta finales de 2023, pero más probablemente en 2024.