Este viernes a las 12:30 del mediodía vence la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y esa misma mañana a partir de las 8:30 las partes se reunirán nuevamente para tratar de acercar a las partes.
Los representantes de las industrias consideraron desmedidos los pedidos de Atilra que ayer habíamos contado en exclusiva.
El gremio sostiene sus pretensiones, que incluyen no sólo un aumento salarial del 50% para el período marzo 2021 – marzo 2022 (se había acordado un 35% a comienzo de año) sino también una actualización de los montos que recibe Atilra como aporte extraordinario y un bono extra para los empleados.
Concretamente el gremio lechero reclama un bono compensatorio de 20.000 pesos por empleado y un aporte al gremio de 6.500 pesos por empleado durante seis meses.
La suma de estos dos pedidos significaría una erogación extra salarial de 1180 millones de pesos para el sector industrial, de los cuales 400 millones serían para los trabajadores y el resto para Atilra.
Hoy habrá reuniones en las cámaras empresariales donde se informará a los socios sobre cómo se ha venido negociando y las posibles alternativas que puedan llevarse a la mesa paritaria el último día de esta semana y con un margen muy estrecho para acordar.
Qué pasará el viernes si no se logra firmar un nuevo convenio es algo que nadie se anima a confirmar. Sería muy raro que a dos días de las elecciones haya una medida de fuerza, pero nadie se anima a descartarlo.