La producción lechera en Paraguay avanza hacia la transformación digital con el apoyo de la Misión Técnica de Taiwán. Recientemente, su jefe, Sheng-Tsai Pan, junto a su equipo, visitó dos cooperativas lecheras del departamento de San Pedro: la Cooperativa San Agustín, en Capiibary, y la Cooperativa Ko’eju, en Santa Rosa del Aguaray. Ambas entidades son parte activa del proceso de modernización que impulsa el Proyecto de Fortalecimiento de la Capacidad para Apoyar el Desarrollo de las Mipymes, actualmente en su segunda fase.
Este proyecto tiene como objetivo promover la adopción de tecnologías digitales en el sector primario, especialmente en la lechería, un rubro clave para muchas economías locales. A través de una alianza entre el Ministerio de Industria y Comercio del Paraguay y la Federación de Cooperativas de Producción, se están aplicando herramientas innovadoras que permiten mejorar la eficiencia, la calidad y la trazabilidad de la producción.
Una de las principales incorporaciones tecnológicas ha sido el uso de sensores conectados a internet (IoT), que monitorean en tiempo real variables como la temperatura y la humedad, factores fundamentales para conservar la calidad de la leche. Este tipo de tecnología permite anticiparse a problemas que podrían afectar el producto, garantizando un mayor control y una respuesta más rápida por parte de los productores.
Además, se ha implementado la aplicación móvil Kesopy, diseñada para facilitar la gestión diaria de las unidades productivas. Con esta herramienta, los productores pueden registrar transacciones, consultar históricos de datos y tomar decisiones basadas en información precisa y actualizada. Kesopy representa un paso significativo hacia la digitalización del trabajo rural, permitiendo profesionalizar la labor de pequeños y medianos productores.
Esta experiencia en San Pedro se proyecta como un modelo para replicar en otras zonas del país. El respaldo del gobierno de Taiwán, sumado al compromiso del sector cooperativo y del Estado paraguayo, muestra cómo la colaboración internacional puede impulsar el desarrollo sostenible y tecnológico en sectores clave como la producción lechera.