Según explicaron voceros de ese espacio a BAE Negocios, se trabaja en una serie de ajustes que no tendrán un costo fiscal significativo y tampoco afectarán al consumo interno, al ser productos agroindustriales que no forman parte de la canasta básica. Estos puntos son centrales, en el contexto de un gobierno que busca recomponer el nivel de divisas y generar acuerdos para frenar el precio de los alimentos.
El último día de 2020 se publicó un decreto que eliminó los derechos de exportación de varios rubros vinculados con las economías regionales, que tributaban un 5%. Entre algunas de las cadenas productivas que se vieron beneficiadas figuran actividades como alfalfa, frutas frescas y secas, girasol confitero, legumbres y la olivícola.
Si bien la agroindustria reconoció este esfuerzo del oficialismo, se remarcó que existen otras cadenas de valor que mantienen las retenciones entre 5% y 12%, como los casos de algodón, arroz, azúcar, lácteos y vino. De acuerdo con estimaciones oficiales, las exportaciones de las economías regionales deberían generar en los próximos cuatro años divisas adicionales por hasta USD600 millones.
Además de la reducción o la quita de los derechos de exportación, el CAA contempla una batería de medidas de estímulo para este eslabón, como la adecuación de reintegros a exportaciones regionales, la simplificación en el recupero de los saldos técnicos de IVA y la amortización acelerada de inversiones. “Trabajaremos de manera específica, sector por sector”, reconocieron voceros de la cadena agroindustrial tras el encuentro con las autoridades nacionales.
El repaso por las actividades presentes en la reunión permite inferir hacia dónde apuntan los esfuerzos del sector privado para disminuir o dar de baja los derechos de exportación. Junto a funcionarios de las carteras de Economía, Desarrollo Productivo, Agricultura y Aduanas, se sentaron representantes de las cadenas de valor de arroz, azúcar, girasol, huevo, lácteos, forestal, papa y vino.
Entre los principales argumentos para justificar este pedido, desde el CAA sostienen que las economías regionales que se encuentran bajo el paraguas de la entidad poseen una fuerte capacidad exportadora. En este punto, argumentan que con esta medida se puede acrecentar el volumen de las exportaciones con valor agregado, mientras que se crean puestos de trabajo y no se afecta la estabilidad fiscal.
“Las economías regionales que integran el CAA tienen una fuerte capacidad exportadora, así como también capacidad ociosa, por lo que continuarán trabajando junto a las autoridades nacionales para acrecentar el volumen de las exportaciones con valor agregado y aumentar las fuentes de trabajo, favoreciendo el arraigo en todo el país y el desarrollo inclusivo, sustentable y federal”, indicaron.
Según las estadísticas del Gobierno, este eslabón involucra de manera directa a 192.000 trabajadores en todo el territorio nacional, lo que representa al 41% del empleo en la industria de alimentos y bebidas. Las exportaciones generarían en cuatro años divisas adicionales por USD600 millones Piden la adecuación de los reintegros a las exportaciones regionales AGROINDUSTRIA 2020 Representaron el 19% de las ventas totales .
El Consejo Aagroindustrial Argentino (CAA) también exhibió cifras contundentes sobre la conformación del eslabón productivo y calcularon que las exportaciones de las economías regionales representaron el 19% de las ventas totales de la agroindustria en 2020, que se encuentran lideradas por el complejo sojero, con un 43%.
En el podio exportador de las economías regionales durante 2020, el primer puesto correspondió a frutas, con ventas por USD1.200 millones; seguido por el sector vitivinícola, con USD1.026 millones, y los lácteos, con USD968 millones.