En el marco de una reunión de las comisiones de Industria y Agricultura en el Congreso para abrir la discusión sobre el proyecto del Gobierno para fomentar las inversiones en la agroindustria, entidades del campo pidieron que se incluya la “eliminación” de las retenciones.
“Lamentablemente, lo que los productores necesitan de forma urgente, que es la eliminación de los derechos a las exportaciones, que en un principio estaba comprendido, con el devenir del tiempo no quedó plasmado en el proyecto”, dijo Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), uno de los asistentes al encuentro. “Lo que estamos solicitando es un acto de igualdad; si queremos trabajar a nivel de toda la cadena, debemos dar situaciones de igualdad para todos los eslabones”, agregó el ruralista.
Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, coincidió con Chemes: “Hay que agregar la rebaja de los derechos de exportación”. Agregó: “Hay otro esquema impositivo que puede ser más benigno que los derechos de exportación”.
También remarcó la necesidad de que “haya reglas claras y previsibles”. Al margen del tema de las retenciones, consideró que “este proyecto es una plataforma de lanzamiento para establecer las políticas de Estado y que los productores tengan previsibilidad”. Destacó como puntos fundamentales la estabilidad impositiva, el aliento a las inversiones y la incorporación de tecnología.
Hace seis meses, la Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria Argentina (FAA) y CRA se retiraron del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), que fue donde comenzó la idea que terminó tomando el Gobierno para un proyecto de ley que contiene diversos estímulos para la compra de insumos, la ganadería, amortizaciones y otras inversiones. De las entidades de la Mesa de Enlace solo quedó Coninagro en el CAA, donde confluyen más de 60 cámaras. El encuentro en las comisiones de Diputados estuvo encabezado por Marcelo Casaretto (Frente de Todos) y Ricardo Buryaile (JxC), titulares de Industria y Agricultura, respectivamente.
“Buscamos que esta ley nos de un marco legal y certezas para invertir más allá de los derechos de exportación”, señaló Elbio Laucirica, vicepresidente de Coninagro. “Necesitamos de estos acuerdos en el parlamento en busca de la promoción del sector con innovación tecnológica y sustentabilidad ambiental”, agregó.
En lo que pareció una respuesta a las palabras de Chemes, el presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, José Martins, dijo que siempre desde el CAA basaron todas las propuestas teniendo en cuenta que “la base piramidal de la agroindustria argentina es el productor argentino”.
“Fueron partícipes los productores, desde distintos sectores, en la construcción del proyecto”, indicó. “El productor agropecuario en su pluma puso lo que creía conveniente para esto”, agregó.
En un comunicado, el CAA resaltó: “El proyecto elaborado por el CAA propone agregar valor a los productos para crear empleos y promover inversiones. Además, pretende, con reglas claras y de largo plazo, exportar 7285 millones de dólares y generar 270.000 puestos de trabajo hacia 2030. El proyecto estipula amortizaciones aceleradas y beneficios fiscales para nuevas inversiones, compras de semillas y fertilizantes, devolución del IVA para inversiones especiales y cambios en el sistema de valuación de hacienda para el pago del Impuesto a las Ganancias”.
Martins destacó que el proyecto implica “la industrialización” para ver de qué forma se puede “crecer en exportaciones agregando valor”. Detalló: “Tiene fuerte implicancia en la generación de divisas para ayudar a estabilizar la macroeconomía”.
En tanto, entre otros aspectos, Alfredo Paseyro, coordinador del CAA sobre la ley, propuso modificar el texto para que la amortización sea en el primer año al considerar que “el contexto inflacionario hace necesario acelerarla para que salga la mejor ley posible”.
En el encuentro, entre otros puntos, se habló de que no haya burocracia a la hora de poner en marcha los mecanismos que contempla la ley, formalmente denominada “Fomento al desarrollo agroindustrial federal, inclusivo, sustentable y exportador”.
Matías Lestani, secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, hizo referencia a la iniciativa como “un primer escalón importantísimo”. Señaló: “Sin duda va a haber un montón de cosas en esta escalera a mejorar y llegar al objetivo que cada uno individualmente tiene, técnicamente y filosóficamente, en lo que tiene que ser el desarrollo agropecuario”.
“Como dijo Domínguez [por el ministro de Agricultura], el proyecto es un pacto con el futuro y una necesidad también de todos los argentinos”, añadió.
Entre otros disertantes, también lo hizo Ezequiel De Freijo, del Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales de la SRA: “De este proyecto queremos dejar en claro que la Sociedad Rural Argentina no participó en ninguna de sus instancias en elaboración de este documento. Lo que interpretamos es que busca impulsar las inversiones abordando temas aislados. No contempla las verdaderas reformas estructurales que hoy están generando la baja inversión que tiene la Argentina y que hacen que la economía no crezca desde 2012″. En ese sentido, mencionó la alta presión tributaria y los derechos de exportación que, aclaró, ”no son legales”.