De la misma manera, la Andi y su Cámara de Alimentos rechazaron las prácticas de presentar productos como leche siendo elaborados a partir de lactosueros ya que vulneran los objetivos de preservar la salud pública y generan confusión en el consumidor.
José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de Fedegán, afirmó que por lo sucedido en enero de este año con las importaciones de leche en polvo, “está claro que no podemos esperar solidaridad de la industria, ni atención a las invitaciones del Gobierno a ‘comprar colombiano’ durante esta difícil coyuntura”.
Según cifras de Fedegán, en 2020 se produjeron 7.400 millones de litros, de los cuales la industria acopió solo 3.330 millones. Según el gremio, esto pone en riesgo el futuro de la producción lechera nacional, en cabeza de 320.000 familias que derivan de ella su sustento, pero también la seguridad alimentaria del país y un renglón importante de la producción agropecuaria.
Por su parte, Camilo Montes, Director ejecutivo de la Cámara de la Industria de Alimentos de la Andi, dijo que “es importante que todos los actores en el mercado, incluyendo industrias de todos los tamaños, importadores, comercializadores, entidades de inspección vigilancia y control, laboratorios, etc., cumplan con la normativa sanitaria nacional que prohíbe expresamente la adición de lactosueros a la leche en todas las etapas de la cadena productiva”.