El precio de la leche pagado a los productores chilenos acumuló una caída del 1.7% durante el primer semestre del año, lo que representa una importante presión sobre la rentabilidad del sector.
Según los datos, el valor promedio por litro ha continuado su tendencia a la baja, afectando directamente los ingresos de los ganaderos. La principal causa de esta disminución es la combinación de dos factores: la baja en los precios internacionales de los productos lácteos y un aumento de la producción nacional, que ha generado una mayor oferta en el mercado interno.
Esta situación preocupa a los productores, quienes enfrentan el desafío de mantener sus negocios viables en un entorno de precios a la baja y con costos de producción que no ceden. La industria lechera chilena se encuentra en un periodo de ajuste y busca estrategias para mitigar el impacto de esta caída y asegurar la sostenibilidad del sector a largo plazo.
Fuente: Diario Lechero, Fedeleche