El instituto agotó sus reservas y sin fondos extra corre riesgo de no poder seguir funcionando.
El presupuesto quinquenal proyectado para el Instituto Nacional de la Leche (INALE) generó alarma en el sector, ya que no contempla los compromisos asumidos con anterioridad.
Una de las claves era transferir los aportes que hace la industria al LATU directamente hacia INALE, algo que no figura en la nueva asignación y que dejaría al instituto sin recursos operativos.
Hasta ahora, INALE pudo sostener su funcionamiento gracias a reservas acumuladas desde su creación, pero esos fondos ya se agotaron y no pueden volver a utilizarse.
Desde la institución y las gremiales coinciden en que la situación es crítica: si no hay una corrección presupuestaria urgente, el organismo podría quedar al borde del cierre.
Productores y dirigentes reclaman al gobierno que se ajuste la partida para garantizar que el instituto continúe cumpliendo su rol de referencia técnica y articuladora para la lechería uruguaya.
Fuente: Blasina y Asociados