Como parte de la estrategia de impulso a la producción agrícola y pecuaria, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural impulsa el desarrollo de los productores de leche de pequeña escala en el país, a través de diferentes instrumentos de apoyo e incentivos que inciden en mayor productividad, rentabilidad y disminución gradual de las importaciones de productos lácteos.
El Gobierno de México apoya a los productores con acompañamiento técnico, desarrollo de capacidades e incentivos productivos como el precio de garantía, así como esquemas de sustentabilidad, tendientes a alcanzar la seguridad y autosuficiencia alimentaria –en una primera etapa— en granos básicos y leche, cuyos primeros resultados reflejan que este año ya no se importará leche en polvo.
En esta nueva dinámica de impulso al sector productivo lechero, de enero a agosto del presente año la producción de leche ha sido de ocho mil 250 millones de litros, lo que representa 2.23 por ciento arriba de lo registrado en el mismo periodo del año pasado.
Con base en la producción registrada al mes de agosto de 2020, al terminar el año se estima alcanzar de 12 mil 500 a 12 mil 600 millones de litros de leche, esto es, 2.4 por ciento arriba de lo alcanzado el año pasado: 12 mil 275 millones de litros. En 2018, la cifra de producción fue de 12 mil 008 millones.
Este año se han beneficiado 11 mil 670 productores lecheros de pequeña escala, a través de bienes y servicios públicos: dos mil 783 mujeres (24 por ciento) y ocho mil 887 hombres (76 %), asociados en 115 grupos de productores en 69 territorios rurales, a lo largo de 81 municipios de 16 entidades federativas.
La Secretaría de Agricultura acompaña a los productores de pequeña escala de leche del país de una manera integral mediante el programa Precios de Garantía, la planeación y producción de alimento, el mejoramiento genético, manejo del hato, higiene, ordeña y conservación de leche y mejoras en la infraestructura y equipo.
De igual forma, la dependencia federal apoya con investigación, capacitación y esquema de financiamiento, a través de bienes y servicios públicos, para aumentar la producción de manera sostenible e impulsar la inclusión y bienestar social, sostuvo la dependencia federal.
El Gobierno de México, en coordinación interinstitucional, fortalece los pilares de la seguridad alimentaria y nutricional, los cuales se basan en la disponibilidad de alimentos de calidad, con una atención en la producción del país; acceso de las personas a los recursos adecuados para adquirir alimentos nutritivos; utilidad, que es la utilización biológica de los alimentos a través de una alimentación adecuada para lograr un estado de bienestar nutricional, y estabilidad, que se traduce en acceso a los alimentos en todo momento.