El Institut de l´Elévage (IDELE) francés acaba de publicar un informe en el que avisa de que ya se detecta un descenso de las cotizaciones de los productos lácteos a nivel internacional debido a la crisis del Covid-19, que ya es una realidad en la leche en polvo y en la mantequilla, y que se extenderá a la leche en polvo y a los quesos.
El 2020 se presentaba cómo positivo para los principales países productores, con un incremento de producción en la UE liderado por Alemania, Francia y los Países Bajos. Un repunte de la leche en origen animado por las buenas perspectivas de los mercados lácteos, que se repitió en los primeros meses del año en Estados Unidos, y que compensaron la caída de la producción en Nueva Zelanda.
“Sin embargo, si la producción láctea aun no se vio afectada por las consecuencias de la epidemia del Covid-19, los mercados internacionales de productos lácteos ya sufrieron un declive en febrero, que podría prolongarse en las próximas semanas, en función de las medidas tomadas por los diferentes países y de la reacción de los compradores sobre el mercado mundial”, informan desde lo IDELE.
“La situación podría deteriorara si hay una bajada de la demanda, sobre todo en los países de Oriente Medio, cuyas economías se resinten por la bajada de los precios del petróleo, y si los mercados no compran esperando a que los precios de los productos lácteos bajen aún más”, continúa el análisis del instituto francés.
El precio de la leche en polvo desnatada se desploma 80 euros en 4 semanas.
Así, uno de los productos lácteos que más notó la crisis del Covid-19 fue la leche en polvo desnatada, un producto que había experimentado un notable encarecimiento en los últimos años, ayudando a mantener los precios de la leche en origen. Sin embargo, y tal y como advierte el informe del IDELE, “en febrero el mercado internacional de las proteínas lácteas es claramente sombrío, ya que después de más 20 meses de subida ininterrumpida, la leche en polvo desnatada en la Unión Europea bajó 80 euros la tonelada en el mercado spot en 4 semanas”.
Caída en el precio de la mantequilla
El precio de la mantequilla en el mercado europeo también está a la baja, después de permanecer estable -en el entorno de los 360 euros la tonelada- en los últimos 6 meses, cayó en las últimas semanas hasta los 350 euros la tonelada de promedio en la UE y a 336 euros en el caso de Francia.
“Si se compra la evolución interanual, con respecto a marzo de 2019, el precio de la mantequilla cayó un 17% en la Unión Europea, mientras que en Estados Unidos ya venía experimentando una leve bajada de precios desde mediados de 2019. La mantequilla en Nueva Zelanda bajó menos su cotización en febrero, probablemente por la menor producción de leche”, explica el informe del IDELE.
Estabilidad en los precios de los quesos
Hasta mediados de marzo las cotizaciones de los quesos en el mercado internacional permanecía estables, con un promedio de 305 euros la tonelada el queso Cheddar, 326 el Edam, 327 el Gouda y 482 euros la tonelada el Emmental. A este respecto, el informe afirma que “hasta comienzos de enero la demanda internacional y europea de quesos era firme, con un incremento de las exportaciones europeas, hasta la propagación mundial del Covid-19”.
Respecto a las previsiones de futuro del mercado internacional de productos lácteos, los expertos del IDELE concluyen que “en las próximas semanas, la caída de las cotizaciones de la leche en polvo desnatada tendría que prolongarse, a un ritmo difícil de prever, pues las incógnitas son muchas, y esta caída de precios se extendería también a los precios de la leche en polvo entera y de los quesos”.
“Aunque los mercados aún aparecen equilibrados, los compradores van a retrasar sus compras y así acelerar la tendencia bajista de los productos lácteos en los mercados internacionales”, remata el estudio.
