Si en marzo tuvieron que perder miles de litros de leche por el apagón eléctrico que continuó en abril, en mayo y lo que va de junio enfrentan la crisis de escasez de combustible, que los mantiene varados con la comercialización de este alimento.
Julio Anzola, representante de Fedenaga en Lara y director de Lácteos Don Manuel, informó que la caída de las ventas de productos lácteos se ubica en 80 % en los últimos tres meses. Basándose en su experiencia personal, relató que a principios de año él producía cuatro mil 500 litros de leche diarios y en la actualidad no llega ni a 900 litros. “Todos los productores de alimentos estamos afectados por la crisis de la gasolina, sobre todo porque trabajamos con productos que se dañan rápidamente“, indicó.
Considera que en zonas de difícil acceso de Carora, es donde se encuentran los productores lecheros que enfrentan más dificultades por el colapso de los servicios como la electricidad y la gasolina. “Si no se puede vender la leche los trabajadores del campo deben invertir más dinero para hacer quesos. Productos para cuajar este alimento se han encarecido”, expresó.
Cecilia Montesinos es productora de leche en Anzoátegui, municipio Morán, asegura que por haber solo una estación de servicio ubicada en El Tocuyo, el desespero por lograr vender la mercancía rápido los conduce a conseguir la gasolina a como dé lugar. “Acá los productores llegan a pasar hasta cuatro días en cola, pernoctan porque solo llega una cisterna de combustible a la semana. Distribuir la leche es un problema porque para sacarla a la venta equivale a pagar cada bidón de gasolina en 25 mil bolívares o seis kilos de café como trueque“, informó.
Ella debe distribuir mil litros de leche al día hacia Mercabar, pero por la escasez de combustible esos pedidos no han llegado a Barquisimeto. “No tan solo porque no hay gasolina, sino porque los comerciantes de Mercabar tampoco se quieren comprometer con nuevo inventario ya que llevan un mes sin vender sus productos por esta misma crisis del combustible”, alegó.
Hember Meléndez, presiente de la Asociación de Ganaderos de Lara, informó que los productores siguen llevando a cuestas el problema eléctrico, los cortes de energía en sitios como Quíbor o zonas como el municipio Urdaneta son constantes. “Y conseguir gasolina para las plantas eléctricas que ellos han podido comprar para refrigerar la leche es casi misión imposible, por cualquier lado se han visto afectados, como aquellos que distribuyen leche a Caracas, no han sacado esos viajes por temor a quedarse en medio de la carretera”, expresó.