Las sanciones obedecen por venta al sector informal, explicó al tiempo que cuantificó que las pérdidas por la no producción de este líquido ascienden a 10 millones de lempiras cada mes.
“Creo que es sumamente delicado el tema sobre todo en esta época de pandemia que es cuando estamos viendo como dinamizamos la economía”, expresó a periodistas en San Pedro Sula.
Detalló que la industria suspendió los castigos de la semana pasada lo que significa que hay anuencia a sentarse y buscarle solución al tema.
No obstante, adelantó que se convocará a un Consejo Consultivo de la Cámara Hondureña de la Leche (Cahle) para plasmar en un documento el pensar y sentir de los productores de leche afectados por estas sanciones.
Consideró que se debe buscar una solución real ya que los productores de leche de esta zona del país trabajan des esta manera desde hace 25 años.
Resaltó que la economía que este sector dinamiza, es la del interior del país, donde también es dónde menos acceso a la salud tienen los ciudadanos.