El comité de empresa de Lactalis-Nestlé de Marchamalo ha iniciado este miércoles una campaña de movilizaciones para exigir a la dirección de la empresa que deje de demorar la negociación del convenio colectivo, que afecta a las más de 500 personas que integran la plantilla.
Los miembros del comité, de los sindicatos CCOO, UGT, USO y CSIF, se han concentrado a las puertas de la planta. Volverán a hacerlo este jueves y no descartan intensificar la presión en los próximos días, después de que la dirección suspendiera la reunión prevista para el pasado viernes escudándose en la situación de nivel 3 en que se encuentra la ciudad de Guadalajara, ha informado CCOO en un comunicado.
El COVID como excusa
“Es solo una excusa para seguir dilatando la negociación. Marchamalo, que es donde tenemos nuestra fábrica, está en nivel 2; y en nuestras propias instalaciones disponemos de espacios donde muy bien podríamos desarrollar las negociaciones”, ha denunciado el presidente del Comité, Ángel Fernández.
Los sindicatos plantean firmar ya un acuerdo de aplicación para este año y volver a sentarse a finales de 2021, para negociar las condiciones de los años siguientes una vez esté más claro cómo evoluciona la pandemia y la situación económica.
Para este año, los representantes de los trabajadores piden un incremento salarial del 4%, que consideran acorde a la actividad y productividad de la planta; y piden acotar ya limitaciones a la desmesurada flexibilidad de jornada y horarios con la que vienen trabajando.
La empresa se limita a ofrecer un 0,5% de incremento salarial y mantener la flexibilidad, sin moverse de su posición en las reuniones mantenidas hasta ahora, según el sindicato.