La remisión mostró un fuerte dinamismo en el primer semestre del año, pero luego fue reduciendo gradualmente expansión. Una primavera relativamente seca conspiró para que el pico de producción sea mayor en esta estación del año. De hecho, en el trimestre setiembre-noviembre, la producción de leche cayó respecto a 2020.
En diciembre, las plantas procesaron 183,2 millones de litros de leche, lo que implicó un aumento interanual de 1,2% en la comparación interanual.