La crisis en alimentos y bebidas cumple 1 año con indicadores negativos mientras la venta de yogures cayó 23,1% en mayo, según un relevamiento sectorial que consideró los volúmenes entregados al mercado.
Si en 2015 la producción primaria de leche sumó 12.061 millones de litros, ¿cómo se explica que en 2019 haya bajado a 10.343 millones en de litros? Ni hablar 2020.

Pero lo del sector lácteo es muy preocupante: el rubro de los yogures, postres y quesos cayó 23,1% en mayo respecto a abril, bajando de 11,1 a 8,5 toneladas comercializadas. Y todo indica que no se ha repuesto del cimbronazo.
De acuerdo a los indicadores de la industria láctea, el mercado de los yogures bebibles cayó 25,7% en mayo respecto a abril, y el mes anterior había caído 8,3%.
Obvio que no sólo atañe a lácteos. Los alimentos en general van para abajo. De lo contrario no podría explicarse el dato que ofreció el INdEC sobre el nivel de ocupación industrial del sector de Alimentos y Bebidas, que cayó al 57% en mayo y que conoció el nivel más bajo de utilización de los 24 meses anteriores.
Pero la industria láctea la está pasando mal.
La venta de postres lácteos, cayó en mayo respecto a abril a mayo, 16,1%.
Los postres lácteos firmes cayeron 21,3% en ese período
Un dato insoslayable: el consumo de yogur cayó 20% durante 2019.
Según OCLA (Observatorio de la Cadena Láctea Argentina), la caída alcanzó a 35% en la reciente década.
Sin duda, tal como lo señala el Centro de la Industria Lechera (CIL), el sector está “frente a una de las crisis más severas de la historia”.
Además, hay una imposibilidad de trasladar la suba de costos, situación que ubica a “muchas empresas al borde del colapso por el quebranto de sus balances”.
Y el precio de referencia de la leche pagado al productor. En el caso de productos como yogures y quesos, un costo del 34% del total, creció 110% desde el 2019 a la fecha, frente a una variación del IPC del 53,8%.
Ni hablar de los precios dolarizados en los insumos del packaging, tales como plásticos y cartón.
Según el relevamiento que realiza OCLA (Observatorio de la Cadena Láctea Argentina), las empresas lácteas que encabezan el ranking de la leche producida en el país son Mastellone y Saputo con el 11,8% y 11,5% de participación, respectivamente.
Pero una característica es la atomización: 64,3% de la producción lo integran 33 empresas y ninguna de ellas tiene más del 15 % en la producción local.
Así, detrás de Mastellones y Saputo, el lote de empresas va entre 4,9% y 2,2% de participación.

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