La necesidad de prebióticos -así como de probióticos y postbióticos- sigue creciendo en el mercado lácteo.

El último informe de investigación de Arizton muestra que el mercado mundial de prebióticos crecerá a una tasa de crecimiento anual compuesta (TCAC) del 11,37% de 2023 a 2029.

«Se prevé que la creciente concienciación sobre los beneficios para la salud de los prebióticos, como la mejora de la salud intestinal y de la función digestiva en general, y el aumento del consumo de productos lácteos funcionales impulsen el crecimiento del mercado mundial», afirma Nexira.

«Los consumidores se centran cada vez más en la salud holística, en particular en la salud intestinal, lo que concuerda con el creciente interés por los “bióticos” (probióticos, prebióticos, postbióticos y simbióticos). Este interés está impulsado por el reconocimiento del papel que desempeñan estos ingredientes en la mejora de la salud intestinal y de otros sistemas corporales.

En concreto, los prebióticos, que incluyen ciertas fibras alimentarias y otras sustancias no fibrosas como los polifenoles, son utilizados selectivamente por los microorganismos huéspedes para conferirles beneficios para la salud. Estos beneficios incluyen mejorar la absorción del calcio, ayudar a regular el azúcar en sangre, nutrir las bacterias intestinales beneficiosas y ayudar a la laxación.»

‘Los bióticos también pueden recibir un impulso de la investigación y pueden ir más allá de los beneficios para la salud intestinal y la salud inmunológica que se han analizado en profundidad a lo largo de esta historia.

Por ejemplo, un estudio reciente, realizado por Jackson y otros, demuestra que la ingesta de la fibra dietética prebiótica oligofructosa sola, o en combinación con el oligosacárido de la leche humana 2’fucosilactosa, promueve un aumento significativo de las bifidobacterias en el intestino y puede dar lugar a mejoras sustanciales del estado de ánimo en adultos sanos con sentimientos de ansiedad y depresión de leves a moderados.

Los resultados mostraron que al final del periodo de intervención de cuatro semanas, los participantes que tomaron el prebiótico oligofructosa solo, o en combinación con 2’fucosilactosa, experimentaron aumentos significativos de bacterias intestinales beneficiosas, entre ellas Bifidobacterium, Bacteroides, Roseburia y Faecalibacterium prausnitzii, en comparación con el grupo de control.

Además, los que tomaron oligofructosa sola o en combinación con 2’fucosilactosa también superaron significativamente al grupo de control en las mejoras de varios parámetros del estado de ánimo.

En declaraciones a Dairy Foods, Denisse Colindres, responsable de comunicación nutricional para Norteamérica de BENEO, con sede en Parsippany (Nueva Jersey), calificó este estudio de «gran avance».

«Dos de cada tres consumidores de todo el mundo ya perciben la importancia de su intestino en el estado de ánimo, afirmando que su salud digestiva influye en su bienestar mental y en sus niveles de estrés. Gracias al eje intestino-cerebro, se puede influir en importantes parámetros del estado de ánimo a través de la modulación de la microbiota”, explica Colindres.

«Dado que los trastornos mentales como la ansiedad y la depresión suponen una carga cada vez mayor para los sistemas sanitarios de todo el mundo, el uso de un enfoque dietético que influya positivamente en la microbiota mediante alimentos respetuosos con el intestino es una propuesta atractiva para disminuir los costes de la sanidad pública y apoyar una vida sana».

«Además de los numerosos beneficios: salud digestiva, control del peso, enriquecimiento en fibra, etc., estos hallazgos apoyarán aún más a los fabricantes en sus esfuerzos por promover la salud de sus productos que contienen las fibras prebióticas inulina y oligofructosa, científicamente probadas», continúa.

Los proveedores de ingredientes, más allá de BENEO, también destacan la importancia de los resultados de este estudio. «El estudio de Jackson et al. hace avanzar significativamente nuestra comprensión de la relación entre las fibras alimentarias, en concreto los prebióticos, y la mejora del estado de ánimo», afirma Joe O’Neill, vicepresidente de ventas y desarrollo empresarial de A&B Ingredients, Fairfield, N.J.

«Esta investigación demostró una conexión entre el consumo de fibras prebióticas y la mejora del estado de ánimo en adultos que experimentaban síntomas de ansiedad y depresión de leves a moderados».

Un intestino sano favorece la salud digestiva y apoya un sistema inmunitario fuerte, afirma Joe O’Neill, de A&B Ingredients. Imagen cortesía de A&B Ingredients.

«Dado el creciente interés de los consumidores por la salud y la nutrición, comercializar eficazmente estos beneficios será crucial para las marcas de alimentos y bebidas que busquen diferenciar sus productos», añade O’Neill.

«Las marcas pueden llegar eficazmente a los consumidores preocupados por la salud comercializando estos beneficios con afirmaciones respaldadas por la ciencia, mensajes en el envase, educación del consumidor y aprovechando las tendencias actuales hacia los alimentos naturales y funcionales.»

Jenn Adams, directora de tecnología de ingredientes y aplicaciones del IFPC, con sede en Fenton, Mo., se hace eco de sentimientos similares: «Comunicando eficazmente estos beneficios que mejoran el estado de ánimo, los fabricantes pueden satisfacer la creciente demanda de productos que promueven el bienestar holístico.

Además, algunas tendencias recientes en el desarrollo de productos apoyan la alimentación como medicina frente a la toma de suplementos más vitaminas. Los consumidores quieren que sus alimentos les aporten beneficios que vayan más allá de la nutrición, incluido el bienestar mental. Un buen ejemplo ha sido el reciente lanzamiento de productos que incorporan ingredientes botánicos además de adaptógenos relacionados con la reducción del estrés.»

Más investigación

Más allá del alivio del estrés, otro estudio, publicado en febrero, concluye que la asequibilidad y la salud intestinal están posicionadas para ocupar el centro del escenario como principales impulsores de las decisiones de compra de los consumidores en 2024, según la encuesta «What’s Trending in Nutrition» de Today’s Dietitian y Pollock Communications realizada a 564 nutricionistas dietistas registrados (RDN).

A medida que los consumidores navegan por los recientes aumentos de los precios de los comestibles, los RDN predicen que la asequibilidad será un motor importante de las compras de los consumidores. La investigación sobre los beneficios de un microbioma sano, desde el estado de ánimo hasta el control del peso, ha despertado el interés por los alimentos que favorecen la salud intestinal. Las RDN predicen que los principales impulsores de compra en 2024 serán los alimentos y bebidas que:

Sean asequibles y estén basados en el valor (65%)
Favorezcan la salud intestinal (60,4%)
Sean fácilmente accesibles y convenientes (59,8%)
Favorecen la inmunidad (52,6%)

«Los superalimentos de 2024 y los principales impulsores de compra demuestran que la salud intestinal, aunque discutida durante mucho tiempo, se está abriendo camino oficialmente entre los consumidores, sin signos de desaceleración», afirma Mara Honicker, editora de Today’s Dietitian.

«Con la encuesta en su duodécimo año, estamos encantados de seguir compartiendo las opiniones de los expertos en alimentación y nutrición, en un momento en el que la inmunidad está marcando fuertemente las tendencias.»

¿Cuál es la diferencia entre las fibras?

Antes de volver al importante papel que desempeñan en la salud intestinal e inmunitaria, los expertos diferencian entre prebióticos, probióticos y postbióticos. Aunque los nombres de los tres ingredientes suenan parecidos, no son lo mismo. Los prebióticos son fibras no digeribles que nutren las bacterias intestinales beneficiosas, fomentando la salud digestiva y ayudando a la absorción de minerales, explica Adams.

«Los probióticos son bacterias beneficiosas vivas que favorecen el equilibrio de la microbiota intestinal, mejoran la función inmunitaria y alivian los problemas digestivos», prosigue. «Los postbióticos son subproductos metabólicos de los probióticos, que ejercen efectos inmunomoduladores y antiinflamatorios, contribuyendo a la salud en general.

La fibra de la raíz de achicoria puede aportar muchos beneficios prebióticos. Imagen cortesía de BENEO.

«Cada componente puede integrarse en diversas fórmulas de productos, como lácteos, suplementos y alimentos funcionales, para mejorar la salud intestinal y el bienestar», añade Adams. «Las combinaciones sinérgicas de prebióticos, probióticos y postbióticos responden a necesidades de salud específicas e impulsan la innovación en el desarrollo de productos».

‘Cada uno de los bióticos desempeña un papel distinto en el apoyo a la salud intestinal y la función inmunitaria, coincide O’Neill. «En términos sencillos, los prebióticos nutren a las bacterias beneficiosas, mientras que los probióticos son las bacterias beneficiosas que se introducen en el intestino.

Los postbióticos ofrecen beneficios para la salud a través de sus subproductos metabólicos. Juntos, estos componentes contribuyen a mantener un equilibrio saludable de la flora intestinal y a favorecer el bienestar general”, afirma.

Demanda creciente

La demanda de todas estas fibras es fuerte, basada en el deseo de los consumidores de gestionar y mejorar la salud de forma proactiva, abarcando la salud digestiva, el apoyo inmunológico, el control del peso y el bienestar mental, señala Adams, y añade que «a medida que la investigación científica siga descubriendo los beneficios polifacéticos de las fibras, se espera que el interés de los consumidores y la demanda de estos productos sigan creciendo.»

Vaughn DuBow, director global de marketing de Soluciones para el Microbioma de ADM, con sede en Chicago, señala que las investigaciones indican que, aunque más del 95% de los consumidores no alcanza la ingesta diaria recomendada de fibra, casi el 80% de ellos cree que la fibra es importante e intenta incluirla en su dieta.

«Además, los consumidores buscan soluciones de fibra dietética para apoyar sus diferentes objetivos de bienestar, desde la digestión hasta la gestión del peso y la saciedad. Por ello, ha aumentado la demanda de productos con alto contenido en fibra”, sostiene. «La asociación de los consumidores con la saciedad y las soluciones de fibra es digna de mención, especialmente en un momento en el que cada vez se presta más atención al GLP-1, una hormona del hambre».

Los consumidores quieren que sus alimentos les proporcionen beneficios que vayan más allá de la nutrición, incluido el bienestar mental, afirma Jenn Adams, IFPC. Imagen cortesía del IFPC.

Los consumidores son cada vez más conocedores de la ciencia del microbioma intestinal, y buscarán ingredientes que favorezcan el crecimiento de bacterias beneficiosas vinculadas a beneficios específicos para la salud, como la cognición o la inmunidad, prosigue Hannah Ackermann, RD, directora de marketing y comunicaciones de COMET, con sede en London, Ont. y sede en EE. UU. en Schaumberg, Ill.

«Esto tendrá un impacto positivo en la categoría de los prebióticos a medida que los consumidores comprendan mejor la eficacia y los beneficios demostrados de estos ingredientes», afirma.

«La mayoría (85%) de los consumidores conocen ya los prebióticos, y más de una cuarta parte han comprado productos que los contienen, según el informe sobre la categoría de prebióticos 2022 de ITC Insights Consumer Supplement User.

El mismo informe revela que los consumidores perciben los prebióticos como extremadamente eficaces. Esta percepción positiva demuestra una sólida oportunidad para que las marcas destaquen la diversidad de prebióticos existentes en el mercado y sus beneficios específicos.»

La salud intestinal equivale a la salud inmunitaria

Como ya se ha mencionado, la salud intestinal puede repercutir directamente en la salud inmunitaria. Pero esto quizá no sea tan obvio para quienes no pertenecen a la industria láctea. ¿Cómo están conectadas ambas?

«¿Sabía que el intestino es el mayor órgano inmunitario del cuerpo? Por tanto, un intestino sano favorece la salud alimentaria y digestiva y apoya un sistema inmunitario fuerte”, subraya O’Neill, de A&B Ingredients.

«Los prebióticos, oligosacáridos no digeribles, alimentan esencialmente a los probióticos, produciendo una serie de ácidos grasos de cadena corta que nutren el tracto digestivo y favorecen una función inmunitaria sana. …Los científicos siguen descubriendo cómo la salud inmunitaria y la intestinal están estrechamente relacionadas. El microbioma intestinal desempeña un papel fundamental en la regulación de la salud inmunitaria».

Los productos lácteos pueden desempeñar un papel muy importante en el apoyo tanto de la salud intestinal como de la inmunitaria al aportar una combinación de probióticos, prebióticos y nutrientes esenciales, continúa O’Neill. «El yogur y el kéfir se encuentran entre los mejores productos lácteos para suministrar probióticos.

Contienen de forma natural cultivos vivos y activos como el Lactobacillus y el Bifidobacterium, que pueden ayudar a mantener un equilibrio saludable del microbioma intestinal”, afirma.

Las bacterias buenas desempeñan un papel fundamental en la función inmunitaria, añade Thom King, director general y científico jefe de alimentación de Icon Foods, con sede en Portland (Oregón).

«El metabolito butirato que forma la mucosa del revestimiento interior del intestino tiene un efecto antiinflamatorio, que favorece el sistema inmunitario», señala. «Butirato, acetato, propionato: se ha demostrado en estudios revisados por expertos que tienen un efecto inmunomodulador que ayuda al organismo a regular las respuestas y reducir la inflamación».

Aproximadamente el 70% del sistema inmunitario reside en el tracto gastrointestinal, señala Robin Hesdahl, director comercial de NutriLeads BV, Países Bajos.

«Ejércitos de células inmunitarias innatas y linfocitos recubren las superficies mucosas de la boca, el esófago y los intestinos. El intestino también alberga billones de microorganismos conocidos colectivamente como el microbioma. Estos incluyen bacterias, virus, hongos y otros microbios».

Imagen cortesía de minoandriani / iStock / Getty Images Plus.

Hesdahl también subraya lo importantes que son los productos lácteos para favorecer la salud intestinal y la inmunidad.

«Sin embargo, existe una oportunidad sin explotar para los productos lácteos enriquecidos con prebióticos. Dado que los lácteos suelen consumirse a diario, productos como la leche, los yogures y los quesos son magníficos para suministrar ingredientes funcionales que proporcionen un apoyo adicional a la salud inmunitaria e intestinal”, sugiere Hesdahl.

«La clave está en encontrar los ingredientes funcionales adecuados: clínicamente probados, pequeñas raciones diarias y propiedades de formulación favorables».

Como ejemplo, Hesdahl menciona el BeniCaros de NutriLeads, que sugiere es un «cambio de juego» porque el prebiótico de precisión es compatible con los lácteos.

«La investigación clínica demuestra que el BeniCaros entrena al sistema inmunitario innato para que responda de forma más inteligente, rápida y fuerte», explica. «BeniCaros también fomenta el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas y la producción de ácidos grasos de cadena corta (por ejemplo, acetato, propionato y butirato) que desempeñan un papel crucial en la salud inmunitaria, intestinal y general.»

Introducción de ingredientes

Los proveedores de ingredientes ven claramente los beneficios de los pre, post y probióticos y están lanzando varias de estas fibras.

Por ejemplo, una nueva investigación, que se está presentando para su publicación, demuestra que el postbiótico ES1 de ADM puede favorecer la salud intestinal y digestiva en general, revela DuBow.

«El nuevo estudio fue un ensayo clínico aleatorizado en humanos, doble ciego y controlado con placebo, en el que participaron 200 adultos con SII-D leve-moderado, y se administró una ingesta diaria del postbiótico ES1 durante un periodo de 84 días», explica.

«El grupo que tomó el postbiótico ES1 obtuvo una puntuación tres veces mejor en el SII-SS de los participantes en comparación con el grupo placebo. También se alcanzaron todos los resultados secundarios.

Hubo una mejora en la puntuación de la calidad de vida (basada en el IBS-QoL) en comparación con el placebo, una reducción significativa de la diarrea ocasional frente al placebo, una reducción significativa de la ‘puntuación media APS’ y una reducción significativa del estrés frente al placebo.»

La suplementación con múltiples cepas y la formulación conjunta de diferentes cepas microbianas están desvelando oportunidades para un apoyo especializado aún mayor, continúa DuBow.

«Por ejemplo, nuestra recientemente introducida formulación Active Lifestyle combina ES1 con BPL15 y BPL4 (Lactobacillus casei CECT9104). La formulación tiene resultados clínicamente documentados que demuestran que apoya ciertos biomarcadores relacionados con el estrés oxidativo posterior al ejercicio, lo que indica su potencial para apoyar aspectos de la recuperación.»

Nexira ofrece inavea PURE ACACIA, cuyos efectos prebióticos están respaldados por más de 40 estudios publicados, que destacan su papel en la promoción de la salud intestinal, la inmunidad y el bienestar general, según la empresa.

«El compromiso de Nexira con la sostenibilidad y la calidad garantiza que siga siendo un ingrediente orgánico de primera calidad con beneficios probados para la salud. Al incorporarlo a diversas aplicaciones como bebidas funcionales, polvos nutricionales y aperitivos ricos en fibra, las empresas pueden ofrecer productos que no sólo saben muy bien, sino que también favorecen la salud digestiva y la inmunidad.

Los estudios en humanos han informado de actividades prebióticas significativas a partir de tan sólo 10 g/día de ella.»

La inavea BAOBAB ACACIA de Nexira no sólo favorece el bienestar digestivo, sino que también se alinea con la creciente demanda de los consumidores de productos sostenibles y de origen ético, añadió la empresa.

Se trata de una «mezcla única de dos productos botánicos africanos, que ofrece un efecto prebiótico sinérgico que contribuye al equilibrio de la microflora y a la salud intestinal en general», declaró la empresa. «Este ingrediente es orgánico, cuenta con la certificación FODMAP y forma parte del compromiso de Nexira de lograr una huella de carbono neutra para la marca inavea».

A&B añadió recientemente fibra prebiótica (inulina) a su cartera. «La fibra de achicoria (inulina) es un prebiótico no modificado genéticamente, totalmente natural, con beneficios digestivos y funcionales, como una mayor cremosidad en aplicaciones en las que la sensación en boca es importante», relata O’Neill.

«La fibra de achicoria tiene un sabor limpio sin motas y, por tanto, no requiere soluciones enmascarantes. La fibra de achicoria se puede utilizar para reducir los «offnotes» asociados a los edulcorantes de alta intensidad en formulaciones reducidas en azúcar.»

Junto con los prebióticos funcionales, A&B Ingredients ofrece el probiótico vegano PA5051. «Está demostrado que este probiótico de origen vegetal reduce los biomarcadores proinflamatorios, lo que podría beneficiar a las personas que padecen síntomas prolongados de COVID-19», añade.

ICON Foods ha añadido recientemente varias opciones nuevas a su línea de ingredientes de fibra prebiótica: FibRefine y Prebiotica. PreBiotica Inulin (raíz de achicoria), PreBiotica JA Inulin (alcachofa de Jerusalén), PreBiotica AG Inulin (agave), PreBiotica P95 FOS (fructooligosacáridos) y FibRefine P90 Soluble Tapioca Fiber (una dextrina resistente procedente de la raíz de la yuca).

«Todos tienen diferentes beneficios funcionales, dependiendo de la aplicación», señala King. «Por ejemplo, nuestra inulina de alcachofa de Jerusalén PreBiotica tiene excelentes propiedades gelificantes y es muy adecuada para quesos y cremas para untar. También aguanta bien las altas temperaturas. Nuestra fibra soluble de tapioca FibRefine (elaborada a partir de raíz de yuca) es ideal en bebidas densas como batidos y smoothies.»

Sin embargo, si los usuarios finales consumen un producto prebiótico o rico en fibra con inulina y tienen una mala experiencia digestiva, es probable que abandonen el producto de por vida, subraya Ackermann.

«El fenómeno es generalizado con los artículos dulces o salados suplementados con inulina. Debido a la simpatía que despiertan los productos, los consumidores se excederán en el consumo de la ración recomendada y experimentarán hinchazón, dolor y otros síntomas negativos.

«Afortunadamente, una nueva clase de prebióticos de primera calidad está llegando al mercado con una mejor tolerabilidad para abordar estas preocupaciones.

Por ejemplo, Arrabina de COMET es una fibra prebiótica de arabinoxilano reciclada a partir de restos de cosechas de trigo. El arabinoxilano es una fibra polisacárida de hemicelulosa con beneficios prebióticos y para el metabolismo de la glucosa en sangre clínicamente probados”, revela Ackermann.

BENEO ha añadido Orafti Organic, una variante ecológica de su popular fibra de raíz de achicoria. «Al igual que los ingredientes de fibra de achicoria convencional de BENEO, Orafti Organic permite a los fabricantes añadir una fuente de una fibra prebiótica probada además de credenciales orgánicas», afirma Kyle Krause, director regional de producto de fibras funcionales y carbohidratos de BENEO en Norteamérica.

«La variante orgánica puede mejorar el sabor y la textura, a la vez que permite reducir la grasa y el azúcar en muchas aplicaciones, incluidos los lácteos».

Futuras formulaciones

El futuro es muy prometedor para los prebióticos, postbióticos y probióticos. «Vemos los postbióticos y los probióticos formadores de esporas como la próxima frontera de la nutrición personalizada, sobre todo para apoyar los alimentos y bebidas lácteos funcionales», señala DuBow de ADM.

«Por ejemplo, aprovechamos las versiones postbióticas tratadas térmicamente de nuestros BPL1 y ES1, así como nuestro probiótico formador de esporas DE111 para ayudar a las marcas lácteas a crear ofertas innovadoras. Estas soluciones están ayudando a impulsar un mayor desarrollo de alimentos y bebidas que incorporan ‘bióticos y pueden funcionar fácilmente dentro de las rutinas diarias de los consumidores.»

Los probióticos y los prebióticos son una excelente oportunidad para crear productos de valor añadido que puedan satisfacer las necesidades de los consumidores actuales, preocupados por su salud”, afirma O’Neill, de A&B Ingredients.

«Las empresas han empezado a comercializar productos que contienen tanto prebióticos como probióticos, conocidos como SYNbióticos, aprovechando el efecto sinérgico y apoyando la salud intestinal y la función inmunitaria», afirma.

«La tendencia de la salud y la nutrición no va a desaparecer. Los consumidores mantendrán su interés por productos que puedan satisfacer sus necesidades dietéticas. Con la investigación científica continuada y las afirmaciones basadas en la ciencia, habrá más oportunidades de comercializar alimentos lácteos nutritivos y beneficiosos para la salud.»

En el futuro, los expertos sugieren muchas formulaciones nuevas, sobre todo a medida que los tecnólogos y científicos de la alimentación adquieran más conocimientos sobre cómo utilizar las fibras prebióticas junto con los probióticos.

Según King, «[mucho] tiene que ver con el apilamiento de fibras y con cómo maximizar la cantidad de fibra que se puede echar en una fórmula sin provocar un impacto gastrointestinal negativo», afirma.

«La solución es apilar distintos tipos de fibras -inulina/FOS y fibra soluble de tapioca (fibra de raíz de mandioca)- tanto para potenciar su efecto prebiótico como para lograr un mayor recuento de fibra en el PNF. Esto funciona ya que la primera es un sacárido y la segunda una maltodextrina, con longitudes de cadena diferentes y vías metabólicas ligeramente distintas dentro del microbioma.»

Tanto Adams, del IFPC, como Hesdahl, de NutriLeads BV, señalan que tanto el cambio de las formulaciones como la educación de los consumidores son vitales para el futuro de los «bióticos».

«En el futuro, las formulaciones de pre, pro y postbióticos pueden ser más específicas, personalizadas e innovadoras, con sistemas de administración avanzados y productos combinados», sostiene Adams.

«Para educar a los consumidores de forma eficaz, es crucial contar con un etiquetado claro, información de fácil acceso para el consumidor, recomendaciones de los profesionales sanitarios, pruebas científicas y testimonios de los consumidores. Estas estrategias ayudan a los consumidores a comprender los beneficios de los pre, pro y postbióticos y a tomar decisiones informadas para su salud.»

La innovación con ‘bióticos continuará, y veremos más alimentos y bebidas funcionales que ofrezcan beneficios inmunológicos, intestinales y de otro tipo para la salud, predice Hesdahl.

«Los lácteos son ideales para estos beneficios añadidos porque se consumen a diario o con regularidad. Los ingredientes ganadores serán los que estén respaldados por una ciencia sólida y tengan los mejores atributos de formulación”, relata Hesdahl.

«Educar a los consumidores sobre los beneficios del producto es vital para el éxito. El conocimiento general de los consumidores sobre los probióticos y los prebióticos es alto, del 84% y el 57%, respectivamente, según FMCG Gurus.

Puede que los consumidores no comprendan las complejidades del microbioma intestinal, pero saben que nutrir las bacterias intestinales beneficiosas es esencial para su salud general. Las empresas lácteas pueden hacer hincapié en este punto y resaltar los beneficios añadidos de sus productos.»

«Según los estudios de tendencias globales de HealthFocus International (de 2018, 2020 y 2022), en América, el interés por los prebióticos creció del 43% en 2018 al 61% en 2022, un aumento significativo», afirma Krause.

«Podemos concluir que, a medida que los consumidores dispongan de más información sobre los efectos positivos de la fibra en el microbioma intestinal, seguirá aumentando el interés por los ingredientes para la salud digestiva en bebidas y otros mecanismos de administración.»