Finalmente la calma llegó a SanCor. Después de 10 meses de parates en sus plantas, la cooperativa láctea, logró restablecer su producción. Ahora avanza en negociaciones con inversores para salvar la marca. “En los próximos seis meses creemos que llegará el dinero necesario para rescatar a SanCor”, dijeron fuentes cercanas a la cooperativa.
SanCor llegó a procesar más de 3 millones de litros diarios pero luego, en medio de una crisis y posterior reestructuración, perdió relevancia. De 14 plantas industriales que tuvo, se quedó con seis. Una cerró definitivamente sus puertas a fin del año pasado. Hasta octubre, estaba procesando unos 500.000 a 550.000 litros diarios, números que se desplomaron en el último bimestre de 2023 y que empeoraron en 2024.
Recién ahora comienzan a acomodarse los números de producción. “Estamos procesando 450.000 litros, similar a octubre del año pasado -antes del conflicto- si consideramos que tenemos una planta menos”, explicaron desde la cooperativa.
Con un presente más estable, SanCor reactivó sus negociaciones con inversores privados para salvar la cooperativa. “Hay acercamientos tanto con grupos nacionales como internacionales”, explicaron desde la empresa que creen que en los próximos seis meses habrá nuevos jugadores.
Los principales interesados en SanCor son los inversores extranjeros. Es que el gobierno de Javier Milei hizo que muchos inversores de la región volvieran a poner el foco en la Argentina.
A fines de noviembre, cuando se cayó el fideicomiso, los directivos de SanCor comenzaron a buscar opciones que saquen a la cooperativa de la crisis. “Desde sociedades independientes en cada planta, dividir las unidades de productos – es decir por marca- con un socio diferente en cada una de ellas o armar un nuevo fideicomiso de cero”, son las opciones que manejan fuentes cercanas a la láctea.
Actualmente, la cooperativa tiene seis unidades de negocios: cremas, dulce de leche, leches, fórmulas infantiles, mantecas y quesos. Esta última es la más importante, ya que concentra la mayor cantidad de productos y marcas de la marca. Pero también la que más demora en retomar su actividad normal, por los procesos que requiere este producto.
Para la cooperativa, es fundamental continuar con sus plantas activas de cara a fin de año para volver a generar dinero en su caja diaria.
El peso de Sunchales
En agosto pasado, la planta de Sunchales, la más importante para la cooperativa, volvió a operar tras 10 meses de bloqueo. “Se llegó a un acuerdo con los trabajadores del gremio lácteo (Atilra) que impedían el funcionamiento de la fábrica. Tras algunos meses de acondicionamiento volvemos a producir como antes del conflicto”, explicaron desde SanCor.
El acuerdo se firmó en el marco de la conciliación obligatoria que dictó el ministerio de Capital Humano. Alcanzando a aquellos empleados que estaban bajo débito laboral (no estaban trabajando) y jornada libre (sucede cuando la materia prima no es suficiente para producir). En total, según comentaron fuentes allegadas a la empresa, se trata de alrededor de 300 colaboradores.
Sunchales es una de las plantas más importantes para la láctea. Allí se procesan leches, formulas infantiles, dulce de leche, crema y mantecas. Durante meses esos productos no estuvieron en las góndolas. “Poco a poco se vuelve a abastecer el mercado”, dijeron en SanCor.
Hoy la láctea cuenta con cinco plantas operativas; a Sunchales se suma Gálvez, en Santa Fe, encargada de madurar y procesar quesos; La Carlota, en Córdoba, dedicada a los quesos duros y de rallar.Se suman Devoto y Balnearia, en donde se fabrican quesos, mantecas y cremas.
El conflicto sindical no solo generó una fuerte pérdida millonaria, sino el cierre definitivo de una de sus plantas. A fines de noviembre, SanCor cerró su planta de producción destinada a quesos blandos en San Guillermo, Santa Fe.
La fábrica de quesos blandos se había reactivado en junio de este año, luego de más de tres años de estar inactiva por falta de materia prima. La puesta en marcha se basó en un convenio comercial que firmó SanCor con Aristeo SA, que durante estos meses le proveo materia prima de la zona.
“No hay planes de reactivar esta planta. El sector lácteo está atravesando una crisis y recién ahora empezamos a ver una recuperación”, finalizaron desde SanCor.