Las aguas no dejan de agitarse en el ámbito de la lechería. Confirmada la caída del fideicomiso que tenía como función rescatar a SanCor, el gremio ATILRA aumentó la presión y sus representantes en el interior de la Argentina advirtieron que, si no hay un salvataje oficial inmediato, el sector entero se encaminará al paro nacional. Desde el entorno del sindicato añadieron que el escenario de despidos en Lácteos Vidal “tampoco se quedará así”, por lo que también habrá medidas alineadas con los trabajadores afectados.

Desde Santa Fe, fuentes ligadas a ATILRA reconocieron a iProfesional que la organización se encuentra en “estado de alerta”. Y anticiparon que el gremio “va a estar lanzando una batería de medidas, aunque si esto no se arregla va a llegarse a un paro nacional en todas las industrias lácteas”.

“Se cumplió con el fideicomiso, se buscaron los empresarios, pero la ayuda del gobierno no llegó y las y los compañeros va a hacer casi 6 años que vienen padeciendo una quita de su sueldo del 50 por ciento. La situación se les complica cada vez más porque no llegan siquiera a cubrir la canasta básica familiar”, afirmó Eduardo Pittón, secretario general de ATILRA Gálvez.

“Es una situación en la que estamos al borde. Tenemos compañeros con problemas psicológicos, familiares, donde hemos llegado a un cuello de botella que no se banca más. Hoy el trabajador de SanCor se lleva el 57 por ciento de su sueldo -alrededor de 130.000 pesos- y hay compañeros a los que se les deben dos meses”, agregó.

En el seno del gremio sostienen que “el Gobierno tiene que venir y decir qué necesita SanCor” y que ya no hay tiempo para “más excusas ni salidas”. En Gálvez, señaló el dirigente, “ATILRA está desembolsando todos los meses muchísimo dinero para sostener (la obra social) de los compañeros de SanCor”.

El derrumbe del fideicomiso se conoció la semana pasada. El objetivo de su conformación era el de sostener a la cooperativa láctea y, según fuentes cercanas a ATILRA, el gremio todavía espera una respuesta favorable del gobierno nacional, que se había comprometido previamente al intento de salvataje para reordenar la capacidad productiva de la empresa, mediante una suma de 60 millones de dólares desde el Banco Nación.

Tras una reunión con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni y el extitular de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, los integrantes de ATILRA lograron un acuerdo en 2021 para recibir beneficios estatales. Con la renuncia de Kulfas en junio pasado, la medida, -que también preveía aportes privados- se estancó. Mientras,

El fideicomiso mencionado era encabezado por Marcelo Figueiras, dueño de Laboratorios Richmond; José Urtubey, mayor accionista de Celulosa Argentina, y Gonzalo Scaglione, controlante del diario La Capital de Rosario.

Lácteos Vidal: sigue el conflicto por los despidos

A la par de lo que ocurre en SanCor, la situación sigue ganando temperatura en Lácteos Vidal y ATILRA también interviene de forma activa en ese conflicto. Los paros impulsados por los trabajadores redundaron en 29 despidos, pero la Justicia hasta ahora se paró del lado de los operarios.

La semana pasada, una medida cautelar dictada por José Ignacio Ramonet, del Juzgado Nacional de Trabajo N°69, ordenó ir para atrás con las cesantías y también dispuso desarticular las 10 nuevas contrataciones efectuadas por la compañía.

La empresa respondió apelando la medida y comunicó a través de Alejandra Bada Vázquez, integrante de la familia que controla Lácteos Vidal, que si la Justicia no cambia su decisión la compañía “está condenada a terminar fundida”.

Por el lado de ATILRA, la organización no emitió comentarios respecto de la decisión tomada por Ramonet, pero sí dejó en claro que continuará acompañando el reclamo de los despedidos.