“El primer trimestre de 2019 se caracterizó por la menor oferta de leche en el campo, por el aumento de la competencia entre industrias para asegurarse la materia prima y por consecuentes alzas en los precios al productor; desde inicios de año el valor promedio de Brasil aumentó 13,7%”, dijo Cepea en su informe del mes de marzo. El precio medio recibido por los productores en febrero fue de R$ 1,415 por litro, unos US$ 0,38 al tipo de cambio de ese mes.
La sequía que sufrieron las regiones Sudeste y Centro-Oeste y el exceso de lluvias en el Sur perjudicaron a la actividad lechera. Además, los productores sufrieron el desestímulo de fines del año pasado por la baja de la facturación y el aumento en los costos de producción.
Para Cepea, hay argumentos que permiten suponer que la firmeza en el precio se logrará sostener a lo largo del año, contrariamente a lo que sucedió en 2017, cuando arrancó con firmeza pero luego se pinchó.
“La diferencia este año está fundamentalmente en el contexto económico, que muestra recuperación del consumo y aumento en el poder de compra de las familias”, dice Cepea.