Según el informe de Estimación de Producción de Leche para el 2021, presentado este viernes por el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), esta se incrementará, en relación a 2020, un 1,51%.
A razón de 11.280,9 millones de litros para 2021 contra 11.113 producidos en 2020. Es a partir de los datos obtenidos por el organismo en base a la información aportada por unas 20 industrias lácteas, que reciben y procesan entre el 50% y el 60% de la leche de Argentina, que se presenta el promedio ponderado de las estimaciones.
Fuente: OCLA.
En el marco de la pandemia, la producción de leche avanzó en 2020 creciendo un 7%, según estimó Caprolecoba (Cámara de Productores de Leche Cuenca Oeste), y se espera que se mantenga el mismo nivel productivo para el año que comenzó.
Tal como señalamos anteriormente, el sector lácteo mostró durante el año pasado, una vez más, su capacidad de adaptabilidad y logró sostenerse gracias al aumento de las exportaciones que crecieron en 2020 casi un 19% en relación al 2019 (que representa 23% en toneladas y dólares), según se desprende de los resultados del Balance Lácteo Anual publicado la semana pasada por la Dirección Nacional de Lechería del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.
No obstante, las cámaras lácteas y entidades agropecuarias señalaron que el condicionamiento de los programas de Precios Cuidados y Precios Máximos definidos por el Gobierno nacional, por un lado, así como los impuestos locales y en especial las retenciones y baja en la devolución de estas al sector exportador (método implementado a modo de paliativo en particular para las economías regionales), dificulta el sostenimiento de la industria y su crecimiento.
Así lo expresó, recientemente, la Mesa de Enlace en un comunicado donde especificó que: “Desde mediados de 2020 el productor está recibiendo un precio insuficiente, por su leche en tranquera de tambo” y además fue puntualmente contra los programas de precios: “Los 10.000 tamberos que todavía quedan en pie, fundamentalmente (un 60 %) pequeños productores y economías familiares, no pueden seguir subsidiando el consumo de 40 millones de argentinos. Esta situación está fuertemente influenciada por el programa de Precios Cuidados, así como el desincentivo a la exportación que presentan las retenciones y los ínfimos reintegros que significa que estamos exportando impuestos”.
Por otro lado, los precios internacionales de la leche entera en polvo (LPE), principal producto de exportación, luego de una baja al comienzo de las restricciones globales por la pandemia, comenzaron a repuntar y, en los últimos meses, se mantuvieron en aumento, siendo la última subasta del Global Dairy Trade del 2,3 por ciento más, con un valor de 3.458 dólares la tonelada, récord en los últimos cuatro años.
Fuente: OCLA.
Al respecto de los precios internacionales y la salida para el crecimiento de la mano de la exportación, Caprolecoba señaló, en su último informe mensual sobre el Panorama Lechero, que la proyección durante 2021 marca precios elevados no solo de los lácteos sino también de la soja y maíz, con lo cual la entidad pone la atención en los derechos de exportación (DEX) como definitorios del futuro del sector. Sobre lo cual expuso los indicadores precisados a través del análisis del OCLA en cuanto a la rentabilidad de la exportación con o sin DEX.
Fuente: OCLA.
“La actual capacidad de pago para un litro de leche exportado como LPE, sin DEX y con reintegros, llega a $29,04 o u$s0,329/litro. Y la FunPEL ya mostró que las cuentas fiscales pueden cerrar mejor “sin” retenciones, que “con” ellas. El país y nuestra lechería necesitan crecer y exportar”, remarcó Caprolecoba.