El Comité de Asuntos Aduaneros, Arancelarios y de Comercio Exterior, más conocido como Comité Triple A, en su sesión 351 del 6 de diciembre de 2021, evaluó la solicitud de imposición de una medida de salvaguardia bilateral a las importaciones de leche en polvo, presentada por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán).
Señala este órgano —cuya función es entre otras la de recomendar al Gobierno Nacional sobre la adopción de medidas de salvaguardia provisional y recomendar al Consejo Superior de Comercio Exterior sobre la adopción de medidas de salvaguardia definitivas—, determinó no recomendar la imposición de la medida.
Argumenta que no se configuraron las condiciones para la aplicación de la medida de daño y relación de causalidad.
Los argumentos de los ganaderos
En enero de 2021, el presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafaurie, solicitó al ministro de Comercio, Industria y Turismo utilizar los mecanismos establecidos en el TLC firmado con Estados Unidos para brindar alivio a los productores nacionales de leche líquida, evitar su quiebra y mantener la seguridad alimentaria del país, sin que el uso de estos mecanismos sirva para incumplir los compromisos pactados.
Concretamente pidió ajustar la administración de los contingentes arancelarios pactados en el TLC con los EE. UU., de tal manera que se pacte y regularice el ingreso de la leche en polvo del contingente a lo largo de todo el año calendario, reduciendo de esta manera el impacto generado a comienzo de cada período de desgravación, permitiéndo de esta manera brindar un espacio de ajuste a la producción nacional.
También le demandó “Acudir y solicitar la imposición de una medida de salvaguardia bilateral para la leche en polvo en virtud de lo pactado en el Capítulo Ocho del TLC “Defensa Comercial” negociado con los EE. UU.”
Razones para solicitar la salvaguardia
Desde tiempo atrás Fedegán ha dicho que el sector ganadero acompaña los TLC, pero advierte que los acuerdos deben traer beneficios para ambas partes. También ha enfatizado en que la salvaguardia no atenta contra el TLC, pues es una medida acordada para casos puntuales y en este caso, es para la leche en polvo, y argumenta las siguientes razones con suficiencia estadística que entregó al Comité Triple A:
1-El aumento de las importaciones de leche en polvo ha generado un daño al productor nacional del bien similar, es decir, de la leche líquida.
2-Existe causalidad entre el aumento de las importaciones y el daño observado.
3- A pesar de tener el TLC, las exportaciones de lácteos a Estados Unidos no se han incrementado en cantidades significativas y no se ha podido exportar un solo kilogramo de carne a dicho destino.
De acuerdo con el gremio ganadero, “Está de por medio el futuro de la producción lechera nacional, en cabeza de 320 000 familias que derivan de ella su sustento, pero también la seguridad alimentaria del país y un renglón importante de la producción agropecuaria; y lo más importante, están comprometidos el equilibrio social y el propósito de equidad del Gobierno Nacional para el campo colombiano”
Con base en los argumentos expuestos por Fedegán la Dirección de Comercio Exterior ordenó el inicio de la investigación administrativa de salvaguardia bilateral a las importaciones de leche en polvo de Estados Unidos. Decisión que fue comunicada al gobierno de EE. UU. a través de la embajada, así como a productores, exportadores e importadores, como parte interesada.
En dicha investigación, se le solicitó a los importadores, exportadores y productores extranjeros la información que ellos consideraran pertinente para sustentar su posición a través de cuestionarios diseñados por el Ministerio de Comercio para este fin.
Retaliación y compensación: argumentos de la contraparte
Pese a los sólidos argumentos que presentó Fedegán del grave daño que se le ha producido a la producción nacional de leche, vale la pena conocer los argumentos tanto la Asociación de Bananeros de Colombia (AUGURA) y la Federación Nacional de Cafeteros, y así como empresarios locales.
Augura manifestó, en carta enviada al presidente de la República, su preocupación por las consecuencias que generaría la eventual aplicación de una salvaguardia bilateral a las importaciones de leche en polvo originarias de Estados Unidos.
Señaló que sí el Gobierno Nacional decidiera aplicar una medida de esta naturaleza podría verse enfrentado a medidas de retaliación por parte de los Estados Unidos, en la forma de incrementos arancelarios sobre productos clave exportados a ese mercado como café, flores, banano, caña de azúcar, confecciones y preparaciones alimenticias, y que Colombia estaría en la obligación de otorgarle una compensación que garantice que el comercio bilateral no se vea afectado.
Según Augura, el Gobierno Nacional se vería obligado a decidir sobre cuáles productos sensibles (maíz amarillo, arroz, pollo, azúcar, entre otros), le otorgaría a los exportadores de Estados Unidos un mayor acceso al mercado colombiano, y que en caso de no llegarse a un acuerdo, EE. UU. estaría facultado para aplicar medidas de retaliación comercial, contra los principales productos de exportación colombianos.
Finalmente argumenta que, en el caso de resultar el sector bananero involucrado en un proceso de retaliación comercial por parte de los Estados Unidos, se afectarían gravemente sus exportaciones que en el año 2020 alcanzaron los USD 916 millones.
Por su parte, la Federación Nacional de Cafeteros, expuso los mismos argumentos (compensación y retaliación) y que la salvaguardia a la leche tendría tendría graves repercusionessu sector.
Otras empresas nacionales argumentaron que no era viable una salvaguardia a la producción nacional de leche porque los ganaderos no producen leche en polvo, frente a lo cual replicó el presidente ejecutivo de Fedegán, José Félix Lafaurie, “Entonces, y disculpen la expresión, ¿con qué carajos se produce la leche en polvo?, que no es otra cosa que la nuestra, pero sin agua y en empaque bonito”.
La Cámara de la Industria de Alimentos de la Andi argumenta que la demanda de la industria no logra cubrirse con la producción nacional y que en estos momentos Colombia no es autosuficiente puesto que el país produce alrededor de 7.000 millones de litros de productos lácteos, pero consume más de 7600 millones y ese faltante proviene de las importaciones, según información registrada en el diario El Tiempo.
Finalmente, la historia le está dando la razón a Fedegán cuando se opuso férreamente a las condiciones en que se estaba negociado el sector ganadero en los TLC: se le negocio como ‘moneda de trueque’.