Se Fue De Río Cuarto A Los Cocos Y Cambió Cerdos Por Ovejas: Hoy Produce El único Queso Ovino Cordobés

Agustín Spina es un emprendedor. Y como tal, su espíritu inquieto no descansa. Hace muchos años puso toda su energía en la producción porcina y comenzó con una chancha en el Gran Río Cuarto y llegó a tener 70 en producción. Pero los números no terminaban de cerrar y decidió dar un giro en su actividad. Cambió cerdos por ovejas Pampinta y se mudó a la granja familiar de Los Cocos, donde inició otro camino. Hoy es el único productor cordobés de quesos ovinos y yogurt griego, pero además, incluyó unas vacas Jersey y las sumó en una suerte de tambo de varias especies.

Con su producción llegó a restaurantes de Buenos Aires y de Córdoba, donde abastece al multipremiado El Papagayo, donde a fines de 2019 cenaron Mauricio Macri, Juan Schiaretti y Juliana Awada. Pero de a poco, le dio una vuelta más a su iniciativa y desde el punto más alto de Punilla desarrolló un paseo por su granja con una serie de estaciones dentro de ese paraíso natural, y a su producción de quesos le sumó nuevas variantes y hasta se puede reservar para comer en ese entorno un cordero a las llamas. Pero en el mundo de Spina hay mucho más, y lo cuenta en una charla con I+I CBA.

Para empezar, viajó más de una década atrás: “Arrancamos en 2011 junto con los cerdos. Llegamos con los porcinos hasta 2018 y luego vendí todo para dedicarme exclusivamente a las ovejas. La base alimenticia de los cerdos era el maíz y el de las ovejas, la alfalfa. Para economías sin campo propio es más económico un animal alimentado a pasturas que a granos. Por eso también cambié de rubro”, explicó Spina a la hora de explicar el cambio de producción.

Y repasó: “Todo comenzó en Los Cocos con una cerda en 2011, haciendo jamones. Pero era inviable en ese lugar. Por eso me mudé a Río Cuarto, puntualmente a Las Higueras. Tenía un pedazo de campo, tenía sala de maternidad, de gestación, habíamos puesto mucho esfuerzo. Llegué a tener unas 70 madres. Pero se encareció mucho la alimentación y fue muy difícil sostenerlo. Y eso que hacía hasta el lechón a domicilio para subsistir; pero igual se hizo inviable”. Y entonces el camino lo devolvió a Los Cocos a 1.300 metros sobre el nivel del mar.

“La zona más alta de todo Punilla, es más alto que El Cuadrado”, explica. Allí tiene ovejas Pampinta, Frisonas, vacas Jersey, llamas y algunas aves de corral. Todo forma parte del equilibrio general de Granja Alhaurín, el nombre que eligió en referencia a un pueblo de Málaga en el que también vivió.